Carta de un investigador del CSIC a Carmen Vela, secretaria de Estado de Investigación, que en junio dijo que sobran investigadores becados.
listadoAntonio G. Valdecasas
La definición de la actividad profesional del científico pasa por una serie de discusiones sobre su delimitación. Es una toma de postura esencial para definir la práctica científica. El autor, biólogo e investigador en el Museo de Ciencias Naturales (CSIC), reivindica una visión de la divulgación que no genere perspectivas falsas, ya que la ciencia no es el objeto ahistórico, apolítico, neutral y universal que se insiste
en presuponer.
EL DISEÑO INTELIGENTE ATACA DE NUEVO. Asistimos a una nueva ola de pensamiento creacionista bajo la etiqueta de diseño inteligente (DI). Sin embargo, el DI no es nuevo ni inteligente y, en cualquier caso, supone el abandono de la lógica científica en la búsqueda del conocimiento. Frente a los que proponen el DI como alternativa a la teoría de la evolución para dar cuenta de la complejidad
de la vida, el autor critica la supeditación de la explicación de lo vivo en esta supuesta ‘teoría’ a una entelequia como Dios, que no es susceptible de investigación objetiva.
Alguien dijo que plantear bien un problema es dar la mitad de la solución. En el caso del comportamiento humano, anunciar, como se ha hecho recientemente, que los genes son la brújula parcial que orienta nuestra existencia no parece que ayude a situar correctamente lo que ya sabemos. Es el momento de reivindicar a investigadores rigurosos, accesibles y críticos como Richard Lewontin, que ha cuestionado conceptos y teorías como el gen egoísta de R. Dawkins, la sociobiología de E. O. Wilson, el concepto de raza humana, o una famosa investigación sobre la sexualidad en EE UU.