LUIS MIGUEL CUERVO, PRESIDENTE DE "TODOS LOS NOMBRES" DE ASTURIAS
“La verdadera simbología franquista

Entrevistamos al
presidente de Todos los
Nombres de Asturias, Luis
Miguel Cuervo. Su grupo
trabaja para la localización
de los desaparecidos
en el frente asturiano.

, Madrid
18/09/08 · 0:00
Edición impresa

DIAGONAL: ¿Cuándo fue creada y
cómo funciona Todos los Nombres?

MIGUEL CUERVO: La iniciativa
surge de varios investigadores que,
por motivos familiares, llevamos en
esto desde hace años. Cuando nos
juntamos hace cinco, partimos con
más o menos 10.000 nombres. En
2006 estrenamos la web (www.todoslosnombres.
es). Nuestra asociación
se mueve por voluntariado. Es
una labor hecha para masoquistas:
perder dinero, perder vacaciones,
pagarte la gasolina, etc. Lo hemos
hecho con cero euros de subvenciones
hasta la fecha.

D.: ¿Qué expectativas tenéis puestas
en este nuevo proceso?

M.C.: Somos muy escépticos. Ya
pasamos por el proceso de la Ley
de la Memoria, que nos dejó casi peor
de lo que estábamos. Nos parece
una iniciativa a valorar por parte del
juez y estamos dispuestos a colaborar
totalmente, pero bueno, llevamos
70 años clamando justicia y
hasta ahora no llegó y no creemos
que pueda llegar de un día para
otro. Pero ojalá el juez Garzón nos
sorprenda gratamente.

D.: ¿Se le han aportado datos?

M.C.: Estamos estudiando cómo lo
haremos, si nos personaremos en
la causa o si facilitaremos los datos
directamente a la Audiencia. Con el
revuelo mediático que hubo nos están
llegando docenas de e-mail. Si
nos dejan hacer un primer envío
ahora y otro dentro de unos meses,
podríamos acercarnos a 20.000 datos
de personas fallecidas en Asturias.
Dejando siempre claro que
en Asturias, como fue el último reducto
del frente norte, los datos que
tenemos no son de asturianos exclusivamente:
hay muchísimos gallegos,
leoneses, vascos y cántabros
que fueron asesinados aquí judicial
o extrajudicialmente.

D.: ¿Qué supuso para vuestro grupo
la Ley de Memoria de 2007?

M.C.: Nos hizo retroceder porque
hubo una parte de la población que
pensó que ya estaba todo solucionado
y que no hacía falta movilizarse
más. La ley no solucionó nada:
en Asturias sigue habiendo doscientas
y pico fosas y más de 10.000
cuerpos desaparecidos. Lo peor es
que se dio importancia a temas que
no la tenían como la simbología,
cuando la verdadera simbología
franquista son las fosas comunes,
son los vertederos que hay encima
de las fosas. Se desvió la opinión
pública y se dejaron los temas importantes
por resolver. Una ley que
no soluciona el tema de las fosas y
no anula los consejos de guerra no
es una ley de la memoria.

D.:¿Cuál debe ser el objetivo de la
recuperación de la memoria?

M.C.: Aunque algunos la critican,
recuperar la memoria es una frase
que lo abarca todo. Queremos que
se devuelva al lugar social que
ocuparon a las personas que fueron
asesinadas a raíz del golpe de
Estado. No queremos venganza
aunque sí justicia. Queremos poder
divulgar, hablar de lo que fue
su vida, cuál fue el ‘mal’ que hicieron:
simplemente, luchar por un
sistema democrático. Por eso fueron
perseguidos, asesinados y torturados
muchos miles de españoles.
Como familiares queremos
que no se les siga considerando
delincuentes. Hay una segunda
parte que es adecentar los sitios
para que no sigan siendo escombreras.
Pero sobre todo, más que
por los cuerpos, queremos luchar
por su memoria.

D.: ¿Habéis encontrado dificultades
para llevar a cabo vuestro trabajo?

M.C.: Recibimos noticias de los familiares
y ponemos a uno o varios
investigadores a trabajar en cada
caso. Esta acción, que debería realizarla
el Estado, la estamos realizando
nosotros. Aquí en Gijón, solicitamos
un local, cuatro horas a la semana,
ni siquiera uno permanente,
para recibir a la gente mayor que
no tiene acceso a internet. Este local
se nos denegó en Gijón y estamos
recibiéndolos en una cafetería.
Hay siete registros civiles de siete
villas importantes de Asturias en los
que los jueces no nos dejan entrar
alegando la privacidad de los datos.
No nos ayudó ni la administración
pública, ni la judicial, ni tampoco la
prensa, que no ha publicado prácticamente
nada de lo que hemos denunciado.
Nos movemos sólo con
la moral de los familiares.


Ejemplo de impunidad para los dictadores

El 30 de agosto la ARMH
emitía un comunicado en
el que recordaba a Garzón
que “no tenía que irse
lejos para encontrar fosas
de desaparecidos”. Hacían
referencia a sus visitas a
las fosas comunes colombianas
y a los procesos
abiertos por este juez contra
militares golpistas en
Chile y Argentina. En opinión
de Vicenç Navarro,
“era un enorme absurdo y
un indicador de gran incoherencia,
que se permitiera
en el sistema jurídico
español juzgar los actos de
las dictaduras del Cono
Sur de América Latina y
permanecer en silencio en
cuanto a los hechos cometidos
por la dictadura
española. El propio sistema
jurídico no puede mantener
a nivel internacional
una credibilidad democrática
a no ser que se enfrente
con esa realidad”.

Como explica el investigador
Francisco Espinosa: “A
pesar de que todo lleva a
pensar que el modelo de
las Juntas Militares del
Cono Sur fue el golpe militar
de Franco y de que
hasta hace poco su única
posible salida no era otra
que la modélica Transición
española, pocos quieren

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