Los centros que segregan a niños y niñas mantendrán el concierto pese a contravenir la ley de educación.

La Sala Tercera del Tribunal
Supremo ha dado la razón a la
Junta de Andalucía y al anterior
Gobierno de Cantabria que negaron
el concierto a dos colegios en
los que se imparte educación diferenciada
por sexo. En ambas
sentencias, el Supremo confirma
las resoluciones de estas dos comunidades
autónomas en torno
a la denegación del concierto y
la no renovación del mismo.
Considera el alto tribunal que dicha
subvención incumple con el artículo
84.3 de la Ley Orgánica de
Enseñanza (LOE), el cual enuncia
que “en ningún caso habrá discriminación
por razón de nacimiento,
raza, sexo, religión, opinión o cualquier
otra condición”.
Sin embargo, las autonomías
controladas por el Partido Popular
han decidido hacer oídos sordos a
esta sentencia y continuarán financiando
los 60 centros de este tipo
que operan en el Estado. El consejero
de Educación del Gobierno de
Navarra, José Iribas, se ha excusado
afirmando que la sentencia se
refiere “a supuestos concretos que
no son el de Navarra”, comunidad
que cuenta con dos de estos colegios
concertados.
El ministro de Educación, José
IgnacioWert, ha anunciado su intención
de modificar la ley señalando
que no es preciso “tocar” la
descripción de las causas de discriminación
del artículo 84 de la
LOE, pero sí “es posible hacer una
referencia explícita a que esta modalidad
de oferta educativa no tiene
por qué suponer ni discriminación
ni segregación”.
Para Francisco Delgado, de
Europa Laica, con esta postura “el
ministro olvida el artículo 14 de la
Constitución, que establece la no
discriminación por género, religión,
opinión o lugar de nacimiento”.
Desde esta organización
consideran que es una “sentencia
saludable, pero el problema de
fondo es que se están financiando
centros dogmáticos católicos
con el dinero público mientras se
degrada la educación pública”.
Críticas a la diferenciada
Un informe realizado por el
Observatorio de Igualdad de
Género de CC OO muestra que
estudiar en alguno de los 22 centros
segregados que hay en
Madrid no garantiza sacar los
mejores resultados. El informe
advierte de que el rendimiento escolar
no debe reducirse a las notas
y conocimientos académicos,
pero aun así entra a estudiar los
resultados obtenidos en la prueba
de conocimientos de 6º de primaria,
realizada por la Comunidad.
Según la comparativa realizada,
sólo tres de los 22 colegios que diferencian
por sexo obtienen la mejor
nota de su zona. Además, 15 de
ellos obtuvieron calificaciones inferiores
a las obtenidas en sus respectivas
zonas por el centro público
que mejor nota obtuvo.
Para
Raquel (Lucas) Platero, docente en
educación secundaria, “los supuestos
datos que se manejan en este
debate están obviando cuestiones
clave como que este tipo de escuelas
son privadas o concertadas,
donde hay un sesgo de clase social”.
Además, apunta que “la escuela
segregada es sexista, transmite
valores erróneos sobre las capacidades
de las chicas y los chicos.
Es un lugar de socialización
básica, segregarla es hacer del proceso
educativo una burbuja irreal”,
lo que convierte “el aprendizaje en
un terreno abonado para que se reproduzcan
los estereotipos e ideas
erróneas sobre el sexo expulsado
de su escuela”. Platero concluye
con que “las destrezas que niños y
niñas necesitan desarrollar no son
ni masculinas ni femeninas, ni son
radicalmente diferentes”.
comentarios
0