La fiscalía no pedirá la extradición a Argentina del expinspector Antonio González Pacheco, alias Billy El Niño, por considerar que los delitos de los que se le acusa han prescrito. La jueza argentina María Servini investiga las denuncias por torturas contra 13 ciudadanos españoles entre 1968 y 1973. La instrucción de Servini también incluye al excapitán de la Guardia Civil Jesús Muñecas Aguilar, acusado de un solo caso de torturas.

Los delitos de torturas prescriben a los 10 años, pero al ser considerados delitos de lesa humanidad la acusación y grupos por la memoria histórica y los derechos humanos defienden que no prescriben. En su escrito, la fiscalía argumenta que la imprescriptibilidad de los casos de lesa humanidad entró en vigor en 1999 -fruto de diversos tratados internacionales firmados por el Estado español- sin carácter retroactivo. La fiscalía también expone que la jurisdicción española "tiene preferencia" frente a la argentina, para juzgar al exinspector ya que "se trata de hechos cometidos en territorio español, por ciudadanos españoles y las víctimas son nacionales españoles".

“Esta posición no nos sorprende en lo más mínimo. El sistema político español va a impedir cualquier condena real del franquismo”, ha declarado a DIAGONAL José María Pedreño, presidente de la federación estatal de Foros por la Memoria. En la misma línea, Emilio Silva, de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), opina que “dados los antecedentes de la fiscalía” no sorprende su posición. “El Gobierno a través de la fiscalía ya ha dicho cuál es su postura, ahora tendrá que decidir la sala”, destaca. En diciembre, el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ya decidió retirar el pasaporte a los dos imputados para evitar una posible fuga del país.