Una ocasión perdida para Chile
- MICHELLE BACHELET. La presidenta chilena
recibe a un indígena de la isla de Pascua.
Lo que hace algunas semanas
era una discusión privada
en círculos interesados
acerca de la propiedad
intelectual y de los derechos se ha
convertido en un debate público,
tanto en blogs y otros foros de discusión
como en los medios de comunicación
oficiales. La ley de propiedad
intelectual chilena debía renovarse
y adecuarse a los tiempos que corren.
En un inicio se creó una mesa de
trabajo a la que fueron invitados
todos los agentes que estaban involucrados
en este tema. El objetivo
era crear un proyecto de ley que
aunara todos los puntos de vista e
intereses de las personas que de algún
modo trabajan con ideas.
La mesa de expertos que conformó
el Ministerio de Cultura convocó
a organizaciones en defensa de los
derechos digitales, de empresarios,
de bibliotecarios, en defensa del
Creative Commons y otros sectores,
además de, por supuesto, a la
Sociedad Chilena de Derecho de
Autor (SCD, la SGAE chilena). La
SCD y el resto de entidades de gestión
colectiva de derechos de autor
fueron las encargadas de propiciar
el debate para la modificación de
una ley que quería tener en cuenta a
puntos de vista muy diferentes.
Pero sin previo aviso y de forma
completamente unilateral, el
Gobierno de Chile, de Michelle
Bachelet, y la SCD llegaron a un
acuerdo. El Gobierno cerraba la posibilidad
a la mesa de diálogo que
había impulsado previamente. El
nuevo proyecto de ley prevé restricciones
desproporcionadas e
incongruentes, no distingue entre
las diferentes utilizaciones de la información.
Por ejemplo, no permite
la traducción de un texto para su uso
en las aulas.
Esta ley plantea un intento desesperado
para ahogar la posibilidad
del acceso universal a la información,
en pos de salvar una industria
que ya estaba muerta. Es más,
en Chile nunca ha existido la posibilidad
de acceder a la cultura de forma
medianamente universal.
¿Y la defensa del Gobierno? Dejar
la responsabilidad al Senado, que
definitivamente será el que apruebe
o no este proyecto de ley. El espacio
inicial de creación y conocimiento
sobre libertades creativas se ha convertido
en una oportunidad perdida.