La APPO no se presenta a las elecciones
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La Asamblea Popular de los Pueblos
de Oaxaca (APPO) acordó en las sesiones
de los días 10 y 11 de febrero
en su I Asamblea Estatal no participar
como organización en las elecciones
de agosto al congreso estatal,
ni en las municipales de octubre.
La gran oposición surgida en el
seno del movimiento oaxaqueño
tras el anuncio del portavoz Florentino
López de que la APPO entraría
en conversaciones con el Frente
Amplio Progresista (FAP), que lidera
el PRD de López Obrador, con el
fin de crear un bloque electoral contra
los derechistas PRI y PAN, hizo
rectificar una decisión que para muchos
afectaba a los principios fundacionales
del movimiento, que defiende
la necesidad de crear un nuevo
orden socio-político al margen de los
partidos y los procesos electorales.
Sin embargo, y con el fin de evitar
una ruptura que, según algunos participantes,
trataban de forzar parte
de los grupos defensores de la vía
electoral, se acordó que aquellas organizaciones
que lo creyeran oportuno
podrían presentarse a las elecciones
a título personal, pero nunca
como APPO. Como condición, se
acordó que los representantes que
se postulen como candidatos deberán
ser elegidos a través de asambleas
populares y, en caso de ser
miembros del Consejo Estatal, deberán
renunciar a él de manera irrevocable
antes de su postulación.
Unas jornadas maratonianas que
sirvieron además para denunciar las
prácticas antidemocráticas que según
algunos muestran organizaciones
como el Frente Popular Revolucionario
(FPR), cuyos miembros son
los más visibles en los medios, y el
Frente Amplio de Lucha Popular
(FALP), ambas defensoras de la participación
electoral. Según David
Venegas, representante de las barricadas
en el Consejo, el FPR ya había
entrado en conversaciones con el
FAP antes de ser decidido por un
Consejo Estatal en cuadro. El FALP,
por su lado, ya había declarado que,
independientemente de lo que se
acordara en la Asamblea, ellos participarían
en las elecciones, además
de mantener convenios de carácter
económico con el Gobierno de Ulises
Ruiz, considerado ilegítimo por
la APPO y cuya renuncia es demandada
desde el comienzo de las movilizaciones.
Según afirman a DIAGONAL
fuentes de la APPO, se trata de
un acuerdo que al final mostrará que
la participación electoral no es una
cuestión ideológica, sino táctica, que
no se está en condiciones de llevar a
cabo un cambio estructural desde
las instituciones; además de desenmascarar
a quienes usan el movimiento
con intereses particulares.