La deuda asfixia a la educación europea
- Manifestación de estudiantes en Turín el 6 de septiembre. Foto: Mirko Isaia
Las imposiciones de ajuste del déficit
por parte del Banco Central
Europeo se han cebado en los denominados
por la prensa económica
anglosajona PIIGS (Portugal, Italia,
Irlanda, Grecia y España). Estos
mandatos se han traducido en estos
países, entre otras medidas, en dramáticas
limitaciones de los presupuestos
dedicados a la enseñanza.
Es la contradicción en la práctica con
aquella idea de una economía europea
basada en el conocimiento que
entronizó el Tratado de Lisboa como
factor diferencial para competir
en el mercado mundial.
Así, esta vez, no es sólo la educación
superior la damnificada, como
sucedió en las anteriores reformas.
Si en los últimos años se había acelerado
el proceso de reconversión de
los centros de educación superior en
universidades-empresa, ahora se ha
recortado la financiación en otros
tramos de la educación. Las diferentes
medidas han supuesto agresiones
a la formación básica que van desde
la disminución de docentes hasta la
introducción, en Italia, de anuncios
publicitarios en las aulas.
La tendencia a recortar en educación
no es nueva, aunque se ha agudizado
con la coyuntura actual. Tampoco
es exclusiva de los denominados
PIIGS, Lituania recortó en un
48% su presupuesto universitario en
2009 y otro 18% en 2010. Estonia,
Irlanda, Croacia, la República Checa,
Macedonia, Polonia, Serbia y Rumanía
están haciendo ajustes severos
de entre un 5% y un 10% en su inversión
educativa, tal y como señala el
informe publicado a principios de
año por la Asociación de Universidades
Europea (EUA).
Mientras que el Banco Central
Europeo (BCE) imponía la austeridad,
Androulla Vassiliou, comisaria
de Educación de la UE, alertara en febrero
de los peligros de recortar la inversión
educativa. Estas advertencias,
contradictorias con los imperativos
del BCE de reducir la inversión social
del Estado, no han impedido que en
este 2011 se hagan recortes de 700
millones en la enseñanza secundaria
italiana o casi 200 millones en la escuela
portuguesa.
Italia e Irlanda, los pioneros
El caso de Italia es paradigmático por
la rapidez con la que se ha producido
el ajuste, y porque la enseñanza italiana
ya había sufrido dos grandes
recortes en los años anteriores. La
primera Ley Gelmini , conocida así
por ser impulsada por la ministra de
Educación Maria Estella Gelmini, en
2008, supuso un recorte en los presupuestos
educativos de 8.000 millones
de euros y unos 130.000 despidos entre
docentes y funcionarios universitarios.
La segunda reforma Gelmini,
aprobada en el otoño de 2010 , puso
el acento del recorte en las becas a
estudiantes y en profesores investigadores.
Además, también supuso la
introducción de un 40% de miembros
de empresas privadas en el Consejo
de Administración (máximo órgano
de la universidad).
La dotación pública para la financiación
de las becas disminuyó de
246 millones de euros a 25,7 millones,
lo que supuso que el 80% de los
estudiantes que tenían derecho a beca
se quedará sin ella. Esta asignación
en 2012 se rebajará hasta los 13
millones y las tasas en cinco años subirán
más del 38%. La reforma
rebaja en más del 20% los fondos
destinados a la investigación académica
en Italia. Afecta a los que llevan
gran peso de la docencia, los investigadores:
quienes después de
seis años no hayan logrado un contrato
abandonarán la universidad.
Se va a reducir el número de profesores
con el llamado turn over (de
cada cinco personas que se jubilan,
sólo se oferta una plaza).
En la enseñanza primaria, el esperpento
llegó del consejo provincial
de Barletyta, Andria y Trani
(sur de Italia) que decidió abrir el
melón de la financiación privada
ofreciendo poner anuncios publicitarios
en las aulas de las escuelas.
Las empresas que paguen 69,80 euros
más IVA pueden comprar una
placa que se pondrá en bancos y sillas
de los institutos.
Irlanda, otrora presentada como
modelo, ha sido otra economía intervenida
a instancias de la UE y el
FMI. Nuevamente, los ajustes se han
realizado sobre el sector público, incluyendo
la educación. Así, entre
otras medidas, el Gobierno irlandés
recortó un 9,4% su presupuesto destinado
a educación. Al mismo tiempo,
las tasas universitarias se han llegado
a multiplicar por cuatro, pasando
de estar en una media de 500 euros
anuales a rondar los 2.000.
Los ajustes de Grecia y Portugal
Grecia y Portugal, pioneros en el formato
de rescates económicos auspiciados
por la UE bajo control alemán,
son buen ejemplo de cómo la inyección
de liquidez en estas economías
se hace a cambio de auténticos planes
de choque sobre sus servicios públicos.
A través de la coartada de la
necesidad de controlar la deuda y el
déficit público, la UE ha comprometido
las “ayudas” a ambas economías
a cambio de draconianos recortes en
sus sistemas educativos.
En el caso de Portugal, la reducción
de la inversión pública en educación
se ha cifrado en 195 millones
de euros, lo que ya significa una reducción
del 8,5% del presupuesto
estatal dedicado a educación. De éstos,
95 millones serán detraídos de
los fondos destinados a la educación
superior, lo que supone un 12,4%
menos del presupuesto del año anterior.
Por otro lado, los recortes también
están afectando a la contratación
de personal. En el caso portugués,
37.000 profesores
interinos quedarán fuera de
sus plazas. De la misma manera, los
recortes también van a afectar a las
ayudas directas al alumnado en forma
de reducción del programa de
bolsas de estudio. Durante este curso,
esta partida será recibida por
64.000 alumnos (12.000 menos que
el curso anterior) y han sido rechazadas
el 37,5% de las solicitudes (alrededor
de 30.000).
En Grecia, sometida ya a un doble
plan de rescate, el Gobierno del PASOK
ha presentado a finales de julio
un proyecto de reforma educativa en
el marco del plan de austeridad más
general destinado a cumplir con las
obligaciones financieras impuestas
por BCE, FMI y Comisión Europea.
Este proyecto afecta a diferentes
cuestiones del sistema educativo,
especialmente del ámbito universitario.
En su mayoría van dirigidas a tratar
de “racionalizar” la estructura administrativa
y de Gobierno de las universidades
griegas (muy en línea con
los planteamientos ministeriales en
el Estado español recogidos en la
Estrategia Universidad 2015).
Estas
propuestas ya han sido criticadas por
la Campaña Universidad Pública,
que las considera destinadas a reemplazar
los órganos académicos por
“consejos de administración”. Pero
el proyecto también viene a consolidar
los recortes en los presupuestos
para la universidad, que en 2010 descendieron
en un 30% y en 2011 lo
han hecho en otro 30%. Los recortes,
además, afectarán de manera aguda
al profesorado. Así, según denuncia
también la Campaña Universidad
Pública, “los nuevos nombramientos
de personal docente seguirán a una
ratio de uno por cada diez jubilaciones”.
En cuanto a la financiación, el
proyecto vuelve a introducir una
cuestión central en la universidad
griega, caballo de Troya en el pasado
para el movimiento estudiantil: la financiación.
Así, el proyecto del Gobierno
prevé introducir fórmulas de
financiación privada y garantizar
las matrículas gratis sólo los tres
primeros años de universidad,
abriendo las tasas a partir de ese
año. Por último, la enseñanza obligatoria
también se verá afectada
por el tijeretazo. La reestructuración
del sistema va a conducir a la
fusión entre sí de casi 2.000 escuelas,
lo que llevará al cierre de casi
mil de ellas. Y, a su vez, se calcula
que entre 3.500 y 4.000 profesores
perderán su trabajo de forma directa
por esta medida.
LOS RECORTES EN EDUCACIÓN SE PROPAGAN POR LOS PAÍSES EUROPEOS
-Inglaterra sube sus tasas
de forma espectacular
Hasta 9.000 libras (unos 10.500 euros)
pueden llegar a pagar los estudiantes
ingleses por un año de matrícula en las
universidades públicas. La cuantía total
de los recortes asciende a la espectacular
cifra de 93.000 millones de euros.
Miles de estudiantes tomaron al asalto
la sede del partido conservador en la
oleada de protestas por la reforma.
-Letonia sufre el más
draconiano de los recortes
En el 2009, las universidades públicas
letonas tuvieron que hacer frente a una
reducción del 48% de su presupuesto,
a la que siguió, en 2010, otra reducción
del 18%. Los profesores han visto reducidos
los salarios, se han congelado las
contrataciones y se han reducido las
becas y servicios para estudiantes, también
en los programas deportivos.
-Estonia y Lituania se suben
a la ola de tijeretazos
Los países bálticos han recibido recomendaciones
de los organismos económicos
internacionales para que disminuyan
su inversión en educación. En
Estonia la inversión cayó un 10% en
2010, continuación del 7% que ya había
disminuido en 2009. En Lituania encadenan
dos años consecutivos recortando el
8% de su presupuesto educativo.
-Rumanía, Hungría y
Bulgaria también recortan
En Rumanía, el recorte asciende a un
10% y se ha cebado principalmente con
el salario de los profesores, que pasarán
a cobrar 230 euros mensuales en
lugar de 360. En Bulgaria, las tasas
para los estudiantes universitarios han
aumentado un 20%. En Hungría, se ha
recortado la inversión prevista para las
universidades en un 15%.
-Los recortes balcánicos
y la República Checa
La República Checa ha recortado
un 5% de su presupuesto en 2011,
pero en 2010 fue un 10%, esto se
ha traducido en sueldos más bajos
para los profesores y menos alumnos
en las universidades. En los
países balcánicos, los menos afectados,
los porcentajes de ahorro
oscilan en torno al 5%.