Las mentiras de British Petroleum
Por la cabeza del consejero delegado
de British Petroleum (BP), Tony
Haywards, debió de estar pasando
la famosa frase: “Salen sólo unos
hilillos” cuando declaró, a mediados
de mayo, que el impacto medioambiental
derivado del hundimiento
de la plataforma petrolera
Deepwater Horizon en el Golfo de
México “probablemente ha sido
muy, muy modesto”.
La que a día de hoy se califica como
la mayor catástrofe en las costas
estadounidenses, por encima del
accidente del Exxon Valdez en
Alaska (1989), aún no ha conseguido
ser frenada. Intento tras intento,
BP no consigue taponar el escape
de crudo que se desató el pasado 22
de abril, tras la explosión y el hundimiento
de la plataforma, que causó
11 muertos. Lo que sí parece claro
es que la marea negra provocada
cada vez adquiere dimensiones más
preocupantes, ya que, la directora
del Servicio Geológico de EE UU,
Marcia McNutt, aseguró a finales
de mayo que los cálculos preliminares
indicaban que el pozo arrojaba
al mar entre 71 y 147 millones de litros
de crudo, es decir, casi dos millones
de litros diarios.
Por su parte, el 4 de junio, la compañía
emprendía el último intento
para frenar las tres fugas, que se sitúan
a 1.500 metros de profundidad,
con la instalación de una cúpula
de contención sobre el pozo
de la plataforma, con el fin de canalizar
parte del petróleo hacia la superficie.
Aunque los esfuerzos por
lograr una solución siguen concentrados
en la construcción de dos pozos
aliviaderos, que no estarán listos
hasta agosto. Tras el fracaso
de la operación ‘top kill’, que intentó
sellar el pozo con barro y cemento,
todas las esperanzas se
concentran ahora en torno a esta
solución. Pero, mientras tanto, ¿es
tan leve el impacto medioambiental
como se preveía? ¿Qué se va a
hacer con los más de 140 millones
de litros de petróleo que forman
parte ya del ecosistema?
Muchos expertos y asociaciones
ecologistas han denunciado estos
días que el derrame tiene asociados
daños de una gran envergadura. En
cuanto a la gestión del crudo, que
ya forma parte del medio, las asociaciones
ecologistas se muestran
críticas con las alternativas que está
gestionando BP.
Dispersantes tóxicos
Greenpeace denuncia que una gran
cantidad del petróleo derramado
en el Golfo de México no saldrá a
flote debido a que la petrolera BP
está usando dispersantes que sumergen
el crudo, aumentando la toxicidad
en las aguas marinas de la
región. La organización ecologista
considera esta técnica como un
“maquillaje verde para ocultar la
magnitud del daño que está dejando
a su paso el vertido”.
Para Greenpeace, BP está exagerando
la efectividad de su respuesta,
en lo que la organización denomina
un “teatro de la respuesta”.
Esta misma fuente denuncia que se
están cometiendo importantes errores,
como la utilización de un dispersante
en la fuente del derrame
conocido como Codetix 9500. “Utilizar
el dispersante representa un
ahorro económico para BP, que tendrá
que contratar menos barcos
pesqueros para recoger el petróleo”,
asegura. BP ha usado ya unos
600.000 litros del Codetix 9500, que
“añaden más toxicidad a la zona, ya
de por sí contaminada, lo que provocará
más daños para la vida marina”.
Reiteran que, cuando no se
usan dispersantes, el petróleo alcanza
la orilla y mata también a las
aves, pero cuando es usado, se queda
en el agua y mata a los peces.
“Es importante tener en cuenta
que matar a los peces significa
eventualmente matar a las aves debido
a que se contamina toda la cadena
alimenticia”, denuncia la organización
ecologista. De hecho, el
Gobierno de EE UU está aún investigando
cuáles pueden ser los impactos
del dispersante y los expertos
no han sido capaces de alcanzar
una conclusión, ya que las empresas
que lo fabrican no indican su
composición exacta. En esta línea,
la Agencia de Protección Ambiental
(EPA, por sus siglas en inglés) lanzó
una serie de directrices para que
se buscaran otras alternativas, menos
tóxicas, ya que “se desconoce
el efecto que el uso masivo de este
potente dispersante químico puede
tener en el ecosistema marino,
puesto que nunca se había usado
en cantidades tan grandes ni a tanta
profundidad”, afirma la agencia.
Según han manifestado algunos
científicos, podría existir alguna
relación entre el uso del dispersante
y la formación de grandes columnas
de crudo submarino. Dichas
columnas de petróleo fueron
descubiertas por un grupo de científicos
de varias universidades de
la zona, quienes certificaron la
existencia de una columna de 16
kilómetros de largo, cuatro kilómetros
de ancho y 91 metros de espesor.
Al mismo tiempo, comprobaron
que en dichas zonas el oxígeno
había caído un 30%, lo que dificulta
aún más la vida animal.
EL VERTIDO EN CIFRAS
95.000 BP calcula
que salen
5.000 barriles de petróleo al
día, otros cálculos dicen que son
entre 25.000 y 95.000 barriles.
444.000 Si se
han
vertido 12.000 barriles por día,
444.000 barriles estarían ahora
mismo flotando en el mar.
257.000 barriles
derramó
el Exxon Valdez. Hasta ahora es
uno de los vertidos más graves.
Impactos en la fauna del golfo de México
Por Julio Rojo
EL PELÍCANO PARDO
Ave símbolo de Luisiana, en las costas del Golfo anidan miles de parejas en época de reproducción. En 2009salió de la lista de especies amenazadas, a la que puede volver por los problemas causados tras la explosión.
Las amenazas a las que se enfrentanlas aves marinas y costerasson la contaminación directapor contacto con el petróleo(pérdida de flotabilidady capacidad para mantener elcalor, lesiones oculares, úlceras,neumonía, daños al hígadoo ingestión de aceite al alimentarseo limpiarse las plumas),la reducción de alimentopor la contaminación de pecese invertebrados marinos y elimpacto del vertido en su hábitat,que provoca que las avesdeban marcharse a otros lugaresmenos óptimos para su alimentacióny reproducción.
ATÚN ROJO
La zona de la catástrofe es de los pocos lugares donde cría este atún, lo que representa un 25% del desove total de la especie.
El vertido supone un nuevogolpe a este pez, en grave peligrode extinción debido a la severasobrepesca a la que ha sidosometido, que continúa trasel fracaso de las negociacionesde la Convención sobre elComercio Internacional de EspeciesAmenazadas de Faunay Flora Silvestres del pasadomarzo. En contacto con elvertido, los peces pierden sucapacidad para combatir lasenfermedades y los contaminantesse acumulan en susórganos. También la exposiciónal petróleo es letal parahuevos y larvas de peces.
MANATÍ
El manatí, un mamífero sirénido que habita en el Golfo de México, es una víctima propiciatoria del calentamiento global. El desastre de Deepwater Horizon ha puesto en riesgo esta especie, que ya estaba catalogada como “vulnerable a la extinción”.
Listada por la Unión Internacionalpara la Conservación de la Naturalezacomo vulnerable a la extinción,las poblaciones de la subespecieque habitan el Golfo deMéxico no sobrepasan los 2.500ejemplares, localizados principalmenteen los manglares de la costaeste de EE UU. Hasta 400 manatíesde Florida migran a Luisianacada verano, según datos delAudubon Aquarium’s RescueCenter, lo que supone un enormeriesgo para estas poblaciones alexponerse a la contaminación directapor contacto con el petróleoo al respirar sustancias químicasvolátiles procedentes del vertido.También se ve drásticamente reducidoel alimento disponible por“asfixia” de las plantas submarinas(son animales herbívoros),producida por la capa de petróleosuperficial, que impide la oxigenacióndel agua y provoca la muertede microorganismos como elplancton o plantas subacuáticas.
TORTUGA BASTARDA
Diez días después del vertido de petróleo ya se habían registrado más de 150 muertes de tortugas marinas, la mayoría de ellas tortugas bastardas.
Las especies afectadas por elderrame incluyen a la tortugaboba, tortuga laúd, tortuga carey,tortuga verde y tortugabastarda. Todas ellas ayudan amantener las praderas marinaspor pastoreo y proporcionan uncontrol natural ecológico de laspoblaciones de medusas. Estastortugas se enfrentan ya a muchasamenazas (pesca accidentalcon anzuelos o redes, cambioclimático), a las que se sumaeste vertido, que tiene efectostóxicos directos sobre víasrespiratorias, ojos, piel o dañosa los sistemas inmunológico,digestivo y reproductor.