sanidad: tres empresas para seis hospitales
Un bocado para fondos de capital riesgo

El proceso para adjudicar seis hospitales sigue su curso a pesar de la oposición.

, Redacción
01/07/13 · 17:23
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González y Lasquetty. El presidente y el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid. / PP Madrid

La admisión a trámite de la querella contra varios cargos y excargos de la sanidad madrileña por la privatización de tres hospitales, Valde­moro, Torrejón y Móstoles, no ha impedido que la Comunidad de Madrid mantenga la velocidad de crucero que el presidente Ignacio González ha establecido para la privatización de la parte sanitaria de seis hospitales, en Aranjuez, Parla, Arganda del Rey, Vallecas, Coslada y San Sebastián de los Reyes. Pero la oposición también crece. El PSOE ha tomado la lucha por otro modelo sanitario como una de sus principales críticas a la política 'popular' y ha interpuesto recursos contra el proceso. También Izquierda Unida ha llevado a los tribunales el concurso en el que se dirime qué empresas se adjudicarán los hospitales. La coalición dirigida por Cayo Lara basa su recurso en una modificación del 3 de junio por la que la garantía que las empresas debían aportar para concurrir a este proceso se redujo de 233 a 23 millones de euros.En marzo se publicó que HIG, que participa en HIMA San Pablo, estaba interesado en adquirir Ribera Salud

16 años después de que la Ley 15/97 posibilitase la entrada del sector privado en el sistema sanitario, la Coordinadora Antiprivatización de la Sanidad (CAS) sigue insistiendo en que cientos de informes demuestran que la privatización de la sanidad aumenta las dos variables fundamentales en los sistemas de salud: la mortalidad y la morbilidad.“El público es más seguro, da más calidad y garantías”, resume Ángel Navarro, de CAS. Esta Coor­dinadora ha recurrido el proceso de privatización de los seis hospitales madrileños ante el Tribunal Administrativo de Contratación Pública de la Comunidad de Madrid ante la evidencia de que hay defectos en los pliegos de licitación del concurso, algo que podría hacerlos nulos.

En concreto, el recurso se centra en cuatro puntos. En primer lugar, la incertidumbre acerca de la naturaleza del contrato, ya que, explica Navarro, “no queda claro si se oferta una gestión de servicios públicos –algo que tendría una duración de diez años– o un contrato de servicios, en cuyo caso sería un acuerdo por seis años”. Otro aspecto poco claro, según CAS, es la falta de claridad respecto a las políticas de subcontratación que permite la convocatoria, “que podría ser abusiva”, explica Navarro.

El tercer punto del recurso de CAS se centra en las condiciones para el establecimiento del capital mínimo de las empresas adjudicatarias. De resolverse el concurso tal y como está planteado, la adjudicataria tiene que firmar un contrato en el plazo de un mes que la transformará en empresa concesionaria. Sin embargo, las condiciones de la Comunidad no establecen qué porcentaje de las concesiones tiene que copar el accionariado de la empresa adjudicataria, de forma que “podría darse paso de manera fraudulenta a empresas que no aparecen en la oferta”. Por último, desde CAS se denuncia la inconcrección respecto al futuro de la investigación y la docencia en los centros privatizados. De prosperar el recurso, “en el mejor de los casos ganaríamos tiempo”, reconoce Navarro.

Capital riesgo y sanidad

El actual presidente, Ignacio González, defiende el proceso de privatización de estos seis centros, que ha sido recurrido también por el PSM, el sindicato de Enfermería Satse o el sindicato de médicos Amyts, y cree que las críticas al mismo son “el pataleo del perdedor”. Para González, “a los ciudadanos no les importa si un hospital está gestionado por la Administración o no, si está bien atendido”.

Tres empresas concurren al proceso. HIMA San Pablo, Ribera Salud y Sanitas no compiten por la mejor oferta, ya que cada uno de estos grupos se planta en solitario en cada centro. El 10 de junio, El Boletín se hacía eco de los rumores sobre la participación del grupo estadounidense Centene en HIMA San Pablo; sin embargo, el presidente de HIMA negaba en ese mismo medio la presencia de Centene. Pero las dudas sobre el papel de HIMA se mantienen. Días después, Cinco Días publicaba que el grupo boricua ha contratado al despacho Jones Day, especializado en fusiones, para gestionar su aterrizaje en la sanidad madrileña a través de los centros de San Sebastián de los Reyes, Parla y Aranjuez. Además, en marzo, el fondo de inversiones Whitehorse, parte del fondo de capital riesgo HIG Capital, uno de cuyos propietarios es el hijo del millonario estadounidense Mitt Romney, financiaba con 237 millones de dólares a HIMA.

En marzo, el portal del Grupo Aseguranza, que representa a empresas de seguros privados, publicaba que HIG estaba interesada en adquirir Ribera, que ha presentado su oferta para la gestión de los hospitales de Arganda y Vallecas. Es solo una de las que aspiran a controlar la mitad de Ribera. El primer grupo del país, IDC Salud, antes Capio, sigue interesado en la absorción de este grupo fundado en la Comunidad Valenciana. También el fondo de capital riesgo Blackstone ha mostrado su interés en comprar la participación de Bankia en Ribera Salud.

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