El primer ministro griego habría remitido una carta a la troika para aceptar los términos de cara a un tercer rescate de Grecia. Esto plantearía un escenario nuevo de cara al referéndum del próximo domingo.
Lo ha publicado a las 11h de la mañana el periodista Peter Spiegel del Financial Times: el primer ministro griego Alexis Tsipras acepta en una carta enviada en la noche del martes las condiciones del FMI, Comisión Europea y Banco Central Europeo, con modificaciones, para un rescate de 29.000 millones de euros. De confirmarse, sería el tercero que solicita el país mediterráneo. El efecto de la carta ha sido inmediato en los medios de comunicación aunque el pulso sigue tan abierto como ayer. La carta cambia la propuesta rechazada el pasado viernes en el monto del rescate (de 16.000 a 29.000) y en la vigencia del acuerdo, de seis meses a dos años, ya que el acuerdo rechazado la semana pasada expiraba si se producía el impago al FMI.
La propuesta será estudiada esta tarde por los ministros de de Economía y Finanzas europeos y puede dar lugar a un nuevo escenario: la revocación del referéndum sobre las condiciones del acuerdo –improbable– o un cambio de postura del Gobierno a favor del 'sí' en la consulta convocada para este domingo. No obstante, Tsipras ha esperado a la decisión del Bundestag alemán que se ha enrocado en su posición de esperar al referéndum antes de abrir una puerta al diálogo que Alemania considera cerrado.
Euclid Tsakalotos, jefe de la delegación negociadora, incidió en que el referéndum es sólo un paso más en la negociación y que no sustituye a la misma. La presidenta del Parlamento griego Zoe Konstantopoulou zanjó ayer los rumores que plantean la revocación del referéndum al afirmar que sería imposible constitucionalmente echar atrás la decisión de consultar al pueblo griego.
Después de cinco años de programas de rescate, esta madrugada Grecia dejó oficialmente de pagar 1.500 millones de euros al Fondo Monetario Internacional, dando carpetazo al segundo programa de rescate. El impago se produjo después de que los ministros europeos, reunidos por videoconferencia rechazara la propuesta de Alexis Tsipras, primer ministro griego, de poner en marcha un tercer rescate a través del Mecanismo Europeo de Estabilidad (ESM), que incorporaría una quita sobre la deuda griega y tendría una vigencia de dos años.
Los medios progubernamentales griegos han explicado que la propuesta del martes por la tarde es básicamente la misma que se remitió por la noche a la Troika, basada en una reestructuración de la deuda y un programa de inversiones. Desde Grecia se teme, asimismo, que la filtración de la carta al Financial Times sea una estrategia para desmoralizar a los votantes de cara al referéndum.
Got my hands on new @atsipras letter conceding on almost all points. QUick story here: http://t.co/VsdKLnWw8M pic.twitter.com/kHIVrvpOBi
— Peter Spiegel (@SpiegelPeter) julio 1, 2015
En la carta remitida por Tsipras y divulgada por el Financial Times, Tsipras rebaja el órdago a la Troika aunque establece pequeñas modificaciones sobre el impuesto a las pensiones, la entrada en vigor del retraso de la edad de jubilación, un tramo distinto de impuesto sobre el valor añadido (VAT) para las islas griegas, la suspensión del objetivo de déficit cero, la no apertura de comercios al por menor los domingos, y la paralización de la privatización del Poder Independiente Transmisión Operador, según ha reseñado el economista Eduardo Garzón en su cuenta de Facebook.
A lo largo del miércoles 1 de julio, se producirá un nuevo encuentro del Eurogrupo con esta carta sobre la mesa, a pesar de que Angela Merkel, canciller alemana, advirtió ayer de que no habría nuevos movimientos para resolver la crisis griega. Merkel, que ha encarnado la posición más dura entre los negociadores de la crisis, espera que un “sí” de la población griega al acuerdo de ampliación de rescate suponga una moción de censura a Syriza; por el contrario un “no” el 5 de julio puede alentar al sector más intransigente de las Finanzas alemanas a forzar la salida griega del euro.
La decisión del Eurogrupo de esta tarde estará pues marcada por la capacidad de desviar la doctrina alemana, que pretende llevar a cabo un castigo "ejemplarizante" contra Tsipras y el ministro de Finanzas griego, Yanis Varoufakis. Francia, segunda economía de la Eurozona, es proclive a alcanzar un acuerdo y restaurar el sistema bancario, en cuarentena por el control de capitales impuesto desde el lunes 29. Estados Unidos, principal actor dentro del FMI, también puede inclinar la balanza a favor del nuevo acuerdo.
Los matices del sí y el no
Pese a que no hay ninguna opción institucional ni jurídica que permita la expulsión de un país de la zona euro, el Banco Central Europeo, correa de transmisión de las políticas económicas del Bundestag, puede mantener el bloqueo de los mecanismos extraordinarios de liquidez para ahogar al Estado griego y que éste se vea obligado a emitir una moneda propia.
La campaña del 'sí' al acuerdo sigue comiendo terreno al 'no', pese a que la opción del Gobierno se impondría el domingo según todos los sondeos: si antes del control bancario de capitales el 'no' tenía un apoyo del 57%, ayer seguía siendo la opción mayoritaria con el 47% pero el 'sí' había subido del 30 al 37%. Desde Grecia se alerta de la campaña del miedo a favor del 'sí', que ayer volvió a convocar a miles de personas en la plaza Syntagma tras la también multitudinaria marcha del lunes a favor de la política de negociación llevada a cabo por Syriza. Pero el último movimiento de Tsipras anunciado hoy para alcanzar el acuerdo puede modificar una situación que ha tensado la Unión Europea hasta mostrar la anómala arquitectura institucional creada en el continente.
comentarios
0