Cada vez más familias se suman a la campaña de ocupación de edificios vacíos de bancos
Organizarse para recuperar vivienda

En el mes de abril, cuatro nuevos edificios pertenecientes a una constructora y bancos han sido recuperados en la capital, lo que se suma a más de 20 en todo el Estado.

06/05/14 · 17:05
Dos menores en una de las viviendas recuperadas en Malasaña. / Dani Gago / DISO Press

“Todas teníamos casos similares. Somos mujeres con hijos, no tenemos apenas ingresos y todas habíamos solicitado anteriormente vivienda al Instituto de Vivienda de Madrid (Ivima), al Ayuntamiento, a Cári­tas...”. Habla Duña, madre de dos hijos, una de las habitantes de La Leona, el segundo edificio recuperado en el barrio de Malasaña en lo que va de año, el cuarto en Madrid en tan sólo un mes, el sexto dentro de la campaña Obra Social Madrid, impulsada por los grupos de vivienda de los barrios y las PAH ante una situación de emergencia habitacional a la que las administraciones siguen sin dar respuesta.

También residente de La Leona, Melina, con una hija de 22 meses, había solicitado una vivienda del Ivima (dependiente del Gobierno regional) gestionada por Cáritas, pero, asegura, le dijeron “que no tenía derecho a la vivienda si no tenía trabajo”. María, embarazada de ocho meses y que vive con su hija de seis años y su madre, fue desahuciada y también solicitó una vivienda, sin obtener respuesta. Mientras que a Maggie, con dos hijos de tres y cuatro años, el Ivima le respondió que no podía acceder a una vivienda de protección debido a que, ante la ausencia de alternativas, había ocupado una casa de banco en Pinto. “En cualquier caso, es más fácil que te toque el sorteo de Navidad que una vivienda del Ivima”, afirma. De hecho, en los últimos meses tanto el Ivima como la Empresa Municipal de la Vivienda (EMVS) se apresuran a deshacerse de sus viviendas de protección, entregándolas a fondos buitre.

“Todas somos mujeres con hijos, sin apenas ingresos y habíamos solicitado vivienda pública”, dice Duña
Y como explica a Diagonal una trabajadora social del Foro ServSo­cial Madrid, “la competencia de vivienda es de la Comunidad, pero ahí no se resuelve nada y ni siquiera sabemos cuántas viviendas del Ivima cedidas a Cáritas han sido concedidas. En cuanto al programa de vivienda solidaria del Ayuntamiento, para familias desahuciadas con hijos, se exigen unos ingresos mínimos de 532 euros que muchas familias no tienen”. En el último año y medio, según explica esta trabajadora, se han multiplicado los casos que reciben de familias que ocupan casas de bancos, ya sea enmarcadas por grupos de vivienda de barrios o de manera espontánea. “Las familias son de todo tipo, pero el 99% tienen menores a cargo”, explica.

Las leonas, organizadas

“Las leonas”, cinco madres y dos abuelas, con ocho menores a su cargo, dieron el último paso el 26 de abril. Anteriormente, varias de ellas, vecinas del barrio, decidieron dar una respuesta colectiva a su situación, hicieron batidas, escogieron el edificio y comenzaron a participar en la Asam­blea de Vivienda Centro, donde otras dos madres se unieron al proyecto. El edificio, de una inmobiliaria, llevaba 17 años vacío, “los mismos que tiene mi primer hijo”, explica Vir­ginia, quien añade que “nosotras llevamos el proyecto y en la Asamblea nos ayudaron a llevarlo a cabo, solas no habríamos podido”. Ahora, apoyadas por la Asamblea de Vivienda Cen­tro, por los grupos y PAH organizados en la Asamblea de Vivienda de Madrid, por los habitantes de La Manuela, edificio de La Caixa recuperado en enero en el mismo barrio, y por sus vecinos, esperan una negociación colectiva con el propietario para lograr un alquiler social. De momento, no han obtenido respuesta.

Objetivo: edificios de bancos

“Hay decenas de miles de familias sin vivienda, y cientos de miles de viviendas vacías. Muchas de ellas son de la banca, y se ha rescatado a la banca con nuestro dinero, así es que son nuestras, y las vamos a seguir recuperando con otras familias que las necesiten”, dice Mercedes, nueva residente en Callejo 13, uno de los tres edificios recuperados por PAH Vallekas el 7 de abril. “Al principio los desahucios eran para personas sin recursos, y yo, como educadora social, recibía a familias en esta situación. Dos años después me ha tocado”, explica Mercedes, con dos hijos, que vio cómo comenzaba a escasear el trabajo a la vez que su marido perdía el suyo. El edificio en el que reside, que aloja a cuatro familias, pertenece a Bankia, rescatada con 22.000 millones de dinero público, pero el banco de momento no ha respondido a las peticiones de negociación colectiva de sus moradores, algo que sí ha hecho el banco Sabadell, que se encuentra negociando una solución con las 11 familias de un segundo inmueble. Los tres edificios se organizan conjuntamente por comisiones de suministros de mobiliario, de suministros estructurales, de comunicación, etc., ya que “la Obra Social va más allá de abrir una puerta e instalarte, es un trabajo más cooperativo. Cuando uno hace una recuperación, no es el final de nada, es el inicio de una nueva lucha, en la que hay que defender, negociar, y eso lo estás haciendo con el respaldo de mucha gente, con un trabajo conjunto”, explica, mientras habla del apoyo recibido por parte del vecindario.

Obra Social versus Sareb

Uno de los principales objetivos de la Obra Social, tanto en Madrid como en el resto del Estado, es la Sareb, la entidad creada para gestionar los activos tóxicos de los bancos rescatados, financiada con dinero público y que dispone de 145.000 activos inmobiliarios. Sometida a una enorme presión por parte de las PAH catalanas, primeras en lanzar la campaña de Obra Social, y que ya cuentan con una quincena de edificios recuperados, varios de la Sareb, la entidad anunciaba que cedería 2.000 viviendas para uso social. Sin embargo, la Junta de Andalucía le abría dos procedimientos administrativos por incumplir la ley autonómica sobre la función social de la vivienda. Hasta ahora, la entidad se ha negado a negociar un alquiler social con las familias que han recuperado sus edificios, y “su estrategia es denunciar”, dice Mercedes. Igual que en Manresa, donde denunció a los habitantes del bloque recu­pe­rado el 14 de abril, en Ma­drid ha denunciado a dos de los habitantes de uno de los inmuebles de Vallecas. También lo hizo con dos de los moradores del primer edificio recuperado en la capital, en el barrio de Caraban­chel, contra los que ahora pesa una orden de desalojo cautelar con fecha abierta dictada por un juez.

Según informa Lara, de Obra So­cial Carabanchel, “en varias ocasiones hemos acudido a la Sareb, pero no sólo no nos han atendido, sino que el jefe de seguridad ha cerrado la puerta a cal y canto. La negociación ha sido imposible, pero disponemos de grupos de apoyo para lanzar una campaña de comunicación y movilización en caso de desalojo”. Desde Vallecas, Merce­des explica que “ante la ausencia de respuesta de la Sareb a las peticiones de negociación, nuestra respuesta va a ser hacer acciones para que la población sepa lo que está ocurriendo con esta entidad”.

Edificios recuperados

Callejo 13 (Vallecas)
Cuatro unidades familiares residen en este edificio recuperado por PAH Vallekas el pasado 7 de abril y perteneciente a Bankia. De momento la entidad no ha respondido a las peticiones de negociación de los habitantes.

Sierra de Llerena 22 (Vallecas)
Fue ocupado hace en enero de 2012, pero su recuperación se hizo pública el 7 de abril, junto a la de otros dos edificios en el barrio de Vallecas. 14 unidades familiares residen en él. Perteneciente a la Sareb, la entidad no sólo se niega a negociar, sino que ha denunciado a dos de sus nuevos residentes.

Argente 8 (Vallecas)
Edificio recuperado el 6 de abril por PAH Vallecas, está compuesto de 11 unidades familiares. El propietario del edificio, el Banco Sabadell, se puso en contacto con sus habitantes a las pocas horas de que se hiciera pública la ocupación del inmueble. Las negociaciones se mantienen en marcha.

La Leona (Malasaña)
Recuperado el 26 de abril de 2014 por cinco madres y dos abuelas con ocho niños a su cargo. La constructora propietaria, Promociones La Fuente de Parla S.L., aún no ha negociado.

La Manuela (Malasaña)
Recuperado el 5 de enero por 14 núcleos familiares de la Asamblea Vi­vien­da Centro. Aunque CaixaBank aún no ha retirado la petición de desalojo cautelar, se encuentra actualmente negociando.

Izan & Brittany (Carabanchel)
Denominado así por dos de los niños residentes en el inmueble. Actualmente, este edificio, en la calle Cadete, 7, el primero en ser recuperado por la Obra Social Madrid, en octubre de 2013, acoge a seis familias. Pertenece a la Sareb, que ha denunciado a dos de sus habitantes. Un juez dictó en marzo el desalojo cautelar, con fecha abierta, de las dos viviendas, pero éste no se ha llevado a cabo de momento.

Imputada la directora del IVIMA

La directora general de Vivienda de Madrid, Ana Gomendio, fue imputada la tarde de ayer 8 de mayo por presunto delito de prevaricación por la venta de pisos del IVIMA. Europa Press informó de la imputación de esta economista por parte del juzgado número 48 de la capital, que se incorporó en 2013 al Instituto de la Vivienda de Madrid procedente de la consultora Arthur Andersen. El juez ha accedido a la demanda presentada por malversación de caudales públicos y prevaricación continuada" en la venta de 3.000 viviendas del IVIMA a la empresa Azora, en un caso que ya fue denunciado a principios de año en las páginas de DIAGONAL. El 6 de junio de 2013, la directora del IVIMA aprobaba la "Enajenación de 32 promociones pertenecientes al Instituto de la Vivienda", para su posterior venta a la sociedad Azora Gestión, decisión que ahora será juzgada por los tribunales.

+A Agrandar texto
+A Disminuir texto
Licencia

comentarios

0

Tienda El Salto