Javier Navarro, uno de los cinco jóvenes
gays detenidos el 3 de junio
de 2005 por su supuesta participación
en una manifestación contra
el ‘capitalismo rosa’ y unos posteriores
incidentes, en el Eixample de
Barcelona, ha sido reconocido por
Amnistía Internacional (AI) como
víctima de insultos, violencia física
y vejaciones policiales por su condición
de homosexual. Navarro, según
su relato, recibió dos palizas en
la comisaría mientras los policías
nacionales le gritaban insultos y
amenazas como “maricón de mierda,
te vas a enterar” y “mariconazo,
no soportas los golpes”. Dada la
gravedad de las agresiones, la misma
policía condujo a Navarro a urgencias
del hospital Pere Camps,
de lo que existe registro de entrada
y salida. La víctima, 36 horas después
de salir de las dependencias
policiales, presentó denuncia en la
Oficina Antidiscriminatoria del
Front d’Alliberament Gai de
Barcelona (FAGC) cuyos representantes
subrayan en declaraciones
a DIAGONAL que “es el primer
caso catalogado en el Estado español
como ‘tortura homofóbica’ y reconocido
como tal por AI”.

Poco después de la detención, el
FAGC presentó una denuncia ante
la Delegación del Gobierno, pero la
respuesta fue el silencio institucional.
Las tres preguntas planteadas
por Iniciativa per Catalunya-Els
Verds por estos hechos tampoco
merecieron una respuesta clara
desde instancias gubernamentales.
Paralelamente, el FAGC remitió un
informe a AI. El pasado 20 de marzo
la organización de defensa de
los DD HH, anunció públicamente
que admitía el caso y que abría
un expediente en lo que supone
un reconocimiento sin precedentes
de violencia homofóbica por parte
de la Policía Nacional.

Para la FAGC, “tras dos años de
espera, salen a la luz la otra cara
de los sucesos, sospechosamente
silenciados por los mismos media e
instituciones que tanto exageraron
los daños en los negocios gays”.