Helios F. Garcés
escritor
“Identidad española y racismo están muy unidos”
El escritor Helios F. Garcés explica que el discurso del odio contra el pueblo gitano está en el origen de los Estados nación europeos.
29/05/15 · 8:00
Edición impresa
Imagen del documental 'El amor y la Ira. Cartografía del acoso antigitano'.
Helios F. Garcés, poeta y redactor de la Guía de recursos contra el antigitanismo, habla con Diagonal sobre el origen de la xenofobia contra el pueblo gitano.
¿Por qué una guía de recursos contra el antigitanismo?
Responde al anhelo de un grupo diverso de gitanas y gitanos a lo largo del Estado. Hay tres intenciones: situar el antigitanismo como la forma de discriminación étnica más permitida y menos atendida del continente europeo, dotar a su análisis de intención y trascendencia teórica y política –que no partidista–, y vincularlo a otras luchas por un mundo nuevo donde, citando al subcomandante Galeano, quepan muchos mundos.
En vuestra guía entráis en polémica con la perspectiva tradicional del racismo. ¿Cuál es vuestra posición en esa discusión?
La perspectiva tradicional está mediada por la visión asistencialista heredera del oenegismo convencional, que escapa al debate ideológico y político. Por otra parte, los análisis sobre el racismo en el Estado español ignoran que modernidad, identidad española y racismo están indisolublemente unidos. Es imposible deconstruir el racismo sin deconstruir el relato de la identidad española hegemónica.
El genocidio gitano atraviesa diferentes etapas. La legislación antigitana en el Estado español se abolió en 1978
En ese análisis emerge el antigitanismo. ¿En qué consiste?
El antigitanismo está en la base del mayor problema cultural de los Estados-nación europeos desde su origen: la gestión de la diferencia. Las identidades hegemónicas se configuran negando al otro, a la otra. Subalternizando su existencia o aniquilándola. La identidad de imperio español en el siglo XVI se articula, siguiendo a Ramón Grosfoguel, con cinco genocidios/epistemicidios: el genocidio contra judíos y moriscos en el contexto de la mal denominada reconquista de Al Ándalus, la expulsión de los judíos; el encubrimiento de América y los genocidios de indígenas y aborígenes en Asia; la esclavitud africana y el genocidio de mujeres con la quema de brujas descrito por Silvia Federici. Falta el genocidio cometido contra los gitanos y gitanas, que comienza en 1499. La legislación antigitana en el Estado español se abolió en 1978.
Una fecha que señaláis, y que suele pasar desapercibida, es 1749.
El 30 de julio de 1749 se hizo la mayor operación para exterminar al pueblo gitano en la península, la Prisión General de los Gitanos, bajo el reinado de Fernando VI. Se intentó encarcelar a todas las gitanas y gitanos para exterminarlos. La idea fue del Marqués de la Ensenada y otros adalides del ideal ilustrado.
En ese contexto surge 'lo gitano'. ¿Qué función cumple este discurso?
Fue mucho antes, pero no hay certeza de cuándo surge el discurso sobre 'lo gitano'. Isaac Motos, en Lo que no se olvida, diferencia entre 'lo gitano' como discurso y 'los gitanos/as', personas de carne y hueso ajenas a este discurso. Desde las primeras menciones a los gitanos desde lo hegemónico puede rastrearse la aparición de un complejo paquete de ideas, proyecciones e imágenes que cumplirá un rol fundamental: la creación de una identidad antagónica, indeseable e incompatible con el nuevo orden ético, económico, religioso y político a la que disciplinar, someter y, a menudo, aniquilar.
Varios capítulos de la guía rastrean algunos casos paradigmáticos de sometimiento y aniquilación.
Por 500 años la persecución antigitana se ha llevado a cabo a través de un pulso filosófico jurídico que desembocó en la puesta en marcha de 2.500 leyes contra los gitanos en la península. Hemos rastreado e interpretado algunos casos. Otro periodo histórico desconocido de la historia europea fue la esclavitud gitana en Rumanía, que duró 500 años y fue abolida en la segunda mitad del siglo XIX. También nos referimos al Porrajmos/Samudaripen, holocausto perpetrado contra los gitanos por el nazismo. Las víctimas gitanas de la Segunda Guerra Mundial han sido invisibilizadas. Ninguna fue invitada a testificar durante los juicios de Nuremberg.
También analizáis la historia del antigitanismo en España. Afirmáis que "en contra de lo que pudiera parecer, los casos de antigitanismo en España no se limitan a denuncias aisladas".
El hostigamiento escolar, la discriminación laboral y el maltrato policial son palpables. La Comisión contra el Racismo y la Intolerancia muestra su preocupación por la existencia de escuelas gueto. La Asociación Europea de Derechos Humanos afirma que "la situación de los gitanos es dramática [...] y se da en todos los países Europeos".
El marxismo ortodoxo suele cometer el error de considerar que racismo y sexismo se erradicarán cuando se erradiquen las clases económicas
El marxismo ortodoxo suele cometer el error de considerar que racismo y sexismo se erradicarán cuando se erradiquen las clases económicas
¿Cómo vincular la lucha contra el antigitanismo con otros frentes?
Con la superación del narcisismo identitario. Es necesario comprender que la lucha no es para cambiar el color, el sexo, la procedencia o identidad del poder, sino para destruir las relaciones de poder. La lucha contra el antigitanismo está hermanada contra el racismo y la xenofobia, sea cual sea el colectivo que la sufra. La lucha contra el antigitanismo, si es radical, también debe perseguir la liberación de las gitanas. El movimiento abolicionista y el feminista estuvieron muy relacionados en EE UU. La batalla real es por un mundo sin jerarquías de poder. Los problemas son los de siempre, y pueden resumirse en la pretensión estúpida de que una lucha está por encima de otra. El marxismo ortodoxo suele cometer el error de considerar que racismo y sexismo se erradicarán cuando se erradiquen las clases económicas. Es un grave error de ceguera etnocéntrica y patriarcal. He tenido problemas para hacer entender la necesidad de luchar contra el racismo antigitano en todos los movimientos sociopolíticos en los que he estado. Citan a los zapatistas, se emocionan con la lucha de las kurdas y corren a las manifestaciones contra el apartheid palestino o la ocupación del Sáhara. Pero las gitanas, los gitanos, estamos más cerca y representamos su otredad histórica. De la misma manera, el recelo gitano por las otras luchas debe ser superado. No podemos mantenernos sólo en nuestros circuitos, la mayoría de los cuales están colonizados.
El caso de Los Palmerales, en Elche
El documental El amor y la Ira. Cartografía del acoso antigitano, de José Heredia Moreno y Manuel Maciá, muestra hasta qué punto el acoso antigitano representa una realidad incuestionable para decenas de familias gitanas. El trabajo se centra en el barrio de Los Palmerales, en Elche, a través del testimonio de sus habitantes, que relatan la violencia policial, mediática y la segregación que sufren.
comentarios
0