El sindicato CGT Catalunya y las CUP piden la retirada de las pensiones otorgadas a Samyang y Bayona, quienes fueron condenados en 2011.
A las 11h de la mañana de hoy 23 de enero, el sindicato CGT presenta dos denuncias en Inspección de Trabajo y en la Seguridad Social por la concesión de la pensión de incapacidad permanente a dos de los guardas urbanos implicados en el caso 4F: Bakari Samyang Davila y Víctor Bayona Viedma. Se trata de dos guardas condenados por falso testimonio y torturas, que han sido indultados por el Gobierno hasta en dos ocasiones. El 20 de enero, el diputado de las CUP en el Parlament, Quim Arrufat solicitó también la retirada de la pensión vitalicia a los dos guardas y la retirada de condecoraciones al exresponsable de Información de la Guardia Urbana, Víctor Gibanel.
Samyang y Bayona fueron condenados en octubre de 2011 por torturar a Yuri Jardine, un joven de Trinidad y Tobago en el año 2006. El juez consideró acreditado que los dos guardas vejaron y golpearon al joven, hijo de un diplomático, y llegaron a apagarle un cigarrillo en el hombro y restregarle una fregona en la cara. A pesar de que trataron de impulsar una nueva petición de indulto, Samyang y Bayona ingresaron en prisión el 8 de enero, eso sí, con una pensión de 1.600 y 1.800 euros respectivamente, según informa La Directa.
CGT Catalunya estima que la concesión de estas prestaciones son "arbitrarias" y critica que coincidan con la entrada en prisión de estos dos condenados por torturas. El sindicato recuerda que la impunidad facilita "que en el futuro se repitan estos mismos comportamientos". A juicio de este sindicato, este tipo de prácticas inmorales obedecen exclusivamente al afán de buscar la fidelidad de los cuerpos policiales al poder político. De este modo, según refleja la Directa, "la elevada cuantía de la pensión que cobran" hace pensar que la pensión que cobran los dos mossos les reconoce una incapacidad total, única que se calcula con el 100% de la base reguladora. Una incapacidad, que según un médico de salud laboral consultado por ese medio, les habría sido otorgada por razones de salud mental. Cabe recordar que el testimonio de Samyang y Bayona fue clave para la condena de cuatro jóvenes en el caso 4F. El relato de los dos policías ante la magistrada Carmen García Martínez tuvo más peso que el testimonio de todos los acusados, las pruebas documentales y la palabra de los peritos que contradecían la versión de los policías.
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