“Trabajo libremente en la calle, lo he decidido por mi propia cuenta. Yo y muchas compañeras hemos decidido libremente trabajar en esto”, explica Karolina Hernández, trabajadora del sexo y portavoz del Colectivo Hetaira. El colectivo en defensa de los derechos de las trabajadoras del sexo ha anunciado que mañana, 15 de febrero, se manifestará en Madrid para protestar contra la criminalización de la profesión. Una criminalización que, según explican, se ha endurecido a raíz del proyecto de Ordenanza de Convivencia Ciudadana en el Espacio Público, presentado por el Ayuntamiento de Madrid, y la propuesta de Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, presentada por el Ministerio de Interior.

Estas normativas “denigran nuestras condiciones de trabajo”, resalta Hernández. La nueva ordenanza madrileña pone el acento sobre la criminalización de los clientes de las trabajadoras del sexo, a los que se pretende sancionar con hasta 1.500 euros de multa, y fue acompañada de una campaña en la que se daban unas cifras sobre mujeres que practican la prostitución de forma coaccionada de entre un 90 y un 95%. Desde el colectivo niegan que esas cifras sean reales, remitiendo a un informe de la Oficina de Naciones Unidas sobre Drogas y Crimen (UNODC por sus siglas en inglés) de junio de 2010 en el que se documenta que entre una de cada siete prostitutas en Europa podía ser víctima de trata de personas con fines de prostitución forzada, “un número importante, cuando hablamos de este grave atentado contra los derechos humanos, pero una cifra muy por debajo de la que se repite en los medios de comunicación y por parte de algunas instituciones que desconocen la realidad social del fenómeno”, apuntan desde Hetaira.

Por un espacio de trabajo

Una de las reivindicaciones del colectivo en Madrid es, según señaló en la rueda de prensa Karolina Hernández, “un espacio para trabajar tranquilas, sin molestar y sin ser molestadas”. No es una reivindicación nueva. Ya en 2011, Hetaira reclamó al Ayuntamiento de Madrid la habilitación de un espacio en el que trabajar, una demanda que fue ignorada desde el Consistorio. “Lo que reclamamos es un espacio con cierto acondicionamiento, como alumbrado o papeleras, y donde la policía pasa de vez en cuando, pero para prestar protección a las trabajadoras, no para hostigarlas”, señalan desde el colectivo.

La manifestación, que partirá a las 17,30h. de Sol (esquina con calle Montera), tendrá como lema “No a la persecución. Negociación de espacios ya!".