¿Movimiento internacional?

Texto de Hanno Bruchmann, Activista de Blockupy y de Izquierda Intervencionista, Alemania

14/08/13 · 7:58
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La tarea no es fácil. No aceptamos el régimen europeo y sus fronteras. No hay una Europa de por sí. Ni un pueblo identificable o distinguible como europeo, pues este se construye. Las realidades y necesidades difieren mucho entre los países. También los movimientos que surgieron. Lo que nos une como movimientos, en este momento, es la oposición a las políticas capitalistas y patriarcales de austeridad por parte de la UE y la troika. Sabemos que es necesario confrontar, a nivel internacional, un sistema de dominación internacional. Para eso tenemos que conocernos, coordinarnos y organizarnos en coaliciones, y plataformas, internacionales. Un poco después, con algo de camino ya andado, podremos tener como resultado acciones comunes y encuentros estratégicos.

El autoritarismo de los Estados

El autoritarismo de los Estados capitalistas europeos se extiende y se reprime con violencia a las fuerzas por el cambio. La violencia no es nada nuevo. Para mantener el orden dominante en las llamadas democracias, los movimientos sociales siempre fueron oprimidos. Ahora la repre­sión se extiende. Porque nos encontramos ante una situación en la cual las fuerzas dominantes están inquietas: la crisis rompe con el orden establecido y al mismo tiempo con supuestas seguridades ideológicas.

Lo que faltó el 14N para que se diera una huelga social europea fue un discurso común

Debemos aprender de los movimientos precedentes. La violencia estatal funciona como disgregadora si no sabemos superar los límites de las culturas de resistencia para contestar conjuntamente esta crisis múltiple.

Formar coaliciones no significa dejar de lado las diferencias ideológicas y organizativas. Es necesario que partidos políticos y sindicatos de izquierda cambien su cultura institucional para fomentar la participación y la autoorganización. A la inversa, los nuevos movimientos no debemos desconsiderar los campos de lucha parlamentarios y económicos. En cada país se pueden encontrar maneras de formar alianzas.

Al mismo tiempo están por crearse y consolidarse coaliciones, a nivel internacional, para enfrentar a los poderes dominantes internacionales. No esperemos obtener resultados rápidos. No nos van a regalar reformas ni son capaces de integrarnos. Pero si se sincronizan los movimientos recientes con la izquierda con más trayectoria en sus campos de lucha, pueden resultar coaliciones afortunadas. La represión violenta y la ignorancia se puede confrontar si juntamos las fuerzas progresistas de las luchas existentes en diferentes sectores, diferentes campos y a nivel internacional.

Blockupy Frankfurt

En Alemania a principios de 2012 se formó una amplia coalición que abarca desde la red de izquierda radical Izquierda Intervencionista, hasta el Partido de Izquierda [Die Linke], pasando por Attac, organizaciones juveniles y estudiantiles, sindicalistas y activistas del movimiento Occu­py, entre otros. En 2012 Blockupy intentó bloquear la sede del Banco Central Europeo (BCE) en Frankfurt (Alemania). Al final la policía prohibió cualquier tipo de protesta y bloqueó ella misma toda la ciudad. Al día siguiente de este bloqueo, unas 30.000 personas participaron en una marcha contra las políticas capitalistas de austeridad de la troika y del Gobierno de Merkel.

Blockupy invita además a una conferencia internacional en Frank­furt, del 25 al 27 de octubre Desde entonces logramos fortalecer esta coalición y el 31 de mayo de 2013 miles de personas bloqueamos el BCE. Después de esta acción, los y las participantes se desperdigaron por la ciudad para denunciar las condiciones de trabajo en las cadenas de producción global de la industria textil; las condiciones laborales de las tiendas en Alemania; el trabajo de cuidados que realizan muchas mujeres sin, o por poca, remuneración; la especulación con las viviendas y las tierras, etc. El 1 de junio, Blockupy se sumó, con una manifestación de 20.000 personas, a las protestas internacionales contra las políticas de austeridad y la troika. La manifestación se encaminaba a la sede del BCE cuando una violenta intervención policial la detuvo. La policía rodeó –acorraló– a un bloque compuesto por unas mil personas. Aunque la policía pidió al resto de la mani­festación que continuara su mar­cha, nadie siguió sus ordenes. Todas y todos se quedaron para exigir la liberación de las manifestantes rodeadas. Como fuerza unida logramos que, en los medios, se denunciara la violencia policial y se reivindicara el derecho a manifestarse contra el BCE y la troika.

Nos encontramos en un proceso de conocernos, aprender y organizarnos para desarrollar medidas y propuestas comunes. Con Blockupy se constituyó un actor confiable. Buscamos ahora fortalecer un proceso constituyente internacional. Existen iniciativas proponiendo encuentros a nivel europeo para este otoño. Ya se ha reunido una red de movimientos, en noviembre de 2012 en Madrid, bajo el nombre de Ágo­ra 99, que busca sincronizar movimientos a nivel internacional. Una próxima Ágora está prevista en noviembre de 2013 en Roma. Para que no sólo puedan debatir los y las que pueden viajar largas distancias, necesitamos con urgencia una plataforma web en que se puedan intercambiar ideas y prácticas. Esta tarea quedó pendiente en la última Ágo­ra 99. Tenemos la esperanza de que acudan personas interesadas que puedan aportar experiencias valiosas y animar los debates. Personas que, a su vez, puedan trasladar los debates internacionales a, y en, sus respectivos contextos locales y regionales.

Hemos visto que durante las jornadas de movilización internacionales comunes, como fueron la del 14N 2012 y del 1 de junio de 2013, no se hizo visible el que los movimientos se movilizaron al lado de sindicatos. Lo que faltó para que se diera una huelga social europea fue un discurso común. Por ello, se están creando plataformas regionales de Blockupy, muy interesadas en que, para los días de movilización conjuntas, las acciones previstas en un país sean adaptables a los demás países. Vale la pena coordinar huelgas sociales europeas con propuestas propias y comunes.

Blockupy invita además a una conferencia internacional en Frank­furt, del 25 al 27 de octubre 2013, para discutir sobre cómo podemos enfrentar la violencia de la troika y qué medidas debemos tomar para lograr coaliciones capaces de cambiar el rumbo. Nos parece indispensable, para un movimiento internacional, organizarnos en una coalición que plantée movilizaciones centrales conjuntas. Montar tal coalición internacional y participar en ella es exigente y difícil. Sólo puede ser una parte de un proceso constituyente descentralizado. No obstante, las an­te­­­­­­­riores grandes movilizaciones internacionales, como las del ciclo antiglobalización, nos muestran nuestra fuerza emancipadora: nos conocimos en el camino, aprendimos los unos de los otros y formamos un movimiento internacional perceptible y visible. Y atacamos a los poderosos más allá de las regiones y Estado-nación constituidos en la UE.

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