Rigurosamente incierto
Me lo dijo Pérez

Si antes se decía que cada español era un seleccionador de fútbol, hoy queda claro que detrás de cada ciudadano hay un experto en altas finanzas.

, Es autor del blog http://palomitasenlosojos.com/
23/11/12 · 14:32
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Hace pocos días empezaron las visitas a la Audiencia Nacional de los 33 miembros del Consejo de Administración de los Últimos Días de Bankia y con ellas una retahíla de declaraciones para responder a las rocambolescas acusaciones de “maquinación para alterar el precio de las cosas”, que creo que es una asignatura troncal de ADE; “falsificación de cuentas” y “administración desleal”, asignaturas optativas; y, para rematar, “apropiación indebida”, que a mí eso me suena a robar. El tema de esas animadas tertulias que los 33 están manteniendo con el juez Fernando Andreu versan sobre la salida a Bolsa de Bankia, que acabó siendo como una operación de trileros, con un gancho que se llevaba 50 euros por adivinar dónde estaba la bolita inmobiliaria y muchos ciudadanos quedándose con cara de pasmados.

¿Quiénes son los Últimos 33 Consejeros de Bankia? Es probable que les venga a la mente la imagen de unos patricios dedicados a conspirar en el Consejo de Admón, que parece el nombre de un demonio oriental pero que es la abreviación de “Administración”, hasta que un día, al grito de “¡crisis económica!”, arremolinan sus togas, sacan sus dagas y se las clavan al Estado del Bienestar. Quítense esas ideas de la cabeza porque los consejeros no son conspiradores sino gente como usted y como yo que por distintos azares de la vida han acabado presidiendo una gran entidad bancaria. Además, la mayoría de ellos eran completamente ignorantes sobre qué se estaba tramando y quedaron estupefactos ante las noticias que les llegaban.

Rodrigo Rato se enteró comprando una pistola, que es como llaman al pan chicloso en Madrid, mientras unas señoras que estaban en la cola hablaban de cambiar sus inversiones bursátiles. Francisco Celma, encargado de la consultora Deloitte y responsable de auditar Bankia, se enteró por un taxista de dos hechos fundamentales: uno, del enorme agujero del banco, y dos, de que Deloitte no es una marca de champú sino una asesoría financiera.

El presidente de Caja Insular de Canarias, Juan Manuel Suárez del Toro, se enteró gracias al conductor de una guagua que hablaba de la pérdida de valor de los activos de Bankia. Ricardo Romero de Tejada, exsecretario del PP de Madrid y vocal en Caja Madrid, se enteró en la empresa de fotocopias en la que aparece en nómina y por donde tributa (esto no es broma) a través de la conversación de dos alumnas que fueron a fotocopiar sus apuntes de “cono”, conocimiento del medio.

José Antonio Moral Santín, exmilitante del PCE, catedrático de la Complutense y coautor del libro La acumulación del capital y sus crisis, se enteró por una pintada que realizaron los alumnos en el urinario. José Luis Olivas Martínez, conocido cariñosamente como “Presidente de la Ruina” tanto de Bancaja como de la Generalitat Valenciana, instituciones que a veces se confunden, se enteró por su caddy de golf, quien afirmó: “Los bancos valencianos estaban bien hasta que se juntaron con los madrileños”, cuando los caddies madrileños pensaban justamente lo contrario…

Los argumentos, pues, que han presentando es que todos estamos unidos por la especulación bursátil y que no existen profesionales económicos cualificados por la sencilla razón de que todos lo somos: desde el encargado de una fotocopiadora hasta un profesor de universidad o un empresario. Por lo que el eslogan con el que decidieron salir a Bolsa, “¿Quieres ser bankero?”, más que una invitación era una absolución de sus pecados. ¡¡Amnistía a los 33!!, ¡¡todos somos bankeros!!

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Como todo el mundo sabe, desde 'El día de la Bestia', las Torres Kio se han desarrollado mucho. / David Fernández
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