COMIC // CARLOS AZAGRA, VETERANO DEL HUMOR GRÁFICO COMPROMETIDO
CRÍTICA A TRAVÉS DEL COLOR

Hablar de Carlos Azagra es
hacerlo de Pedro Pico y Pico
Vena, Ovidio, ‘El Jueves’,
‘TMEO’, historias en
imágenes que resumen más
de 30 años de profesión de
uno de los referentes del
humor gráfico político
en el Estado español.

02/10/08 · 0:00
Edición impresa

En 30 años el panorama del humor gráfico
político ha cambiado por completo
en el Estado español. “Me acerco al kiosco
y ya no queda prácticamente nada
que se pueda considerar crítico, cuando
hace unos años había un montón de revistas
interesantes”, comenta Azagra al
repasar su carrera.

Fue en el año 1975 cuando logró que
le contrataran por primera vez para dedicarse
profesionalmente al dibujo. Por
aquellos años, los de mayor activismo
político, militaba en las entonces ilegales
Juventudes Comunistas. “Aunque yo soy
más anarco”, reconoce el dibujante, “pero
lo que los puristas llamarían un ‘anarco
imperfecto’ por mi pasado en las
Juventudes, pero era lo único que existía
en la época”. Después de su paso por varias
publicaciones de cómic como Makoki
o El Víbora, así como por fanzines
vinculados a sindicatos como CNT, en
1984 comenzó a colaborar con la revista
El Jueves.

Reflejo de la sociedad

Sus dibujos siempre han sido reflejo de
la realidad que le rodea. “La política de
actualidad no me interesa, me nutro de
lo social, a lo otro ya se dedica mucha
gente”, afirma el dibujante nacido en Morón
de la Frontera y criado en Zaragoza.
En este sentido, internet ha cambiado su
forma de trabajar: “Antes salía más a la
calle, me fijaba en los grupos alternativos,
lo que me rodeaba, ahora me nutro
más de lo que veo en las webs de información
alternativa”, continúa.

JPG - 13.5 KB
 
Azagra
siempre ha sabido criticar
con sus dibujos
aquello que no le gustaba.

A lo largo de 30 años ha tenido que enfrentar
numerosos obstáculos, varios juicios
por injurias a la Iglesia y coqueteos
con la censura. “En todo este tiempo, tienes
que saber practicar una especie de
autocensura, porque tú sabes que para
comer hay que saber cómo poner las cosas”,
afirma Azagra. Tras el secuestro judicial
de El Jueves, ha vuelto a surgir este
asunto, con el cambio de una viñeta en la
que se citaba a Telefónica. “En realidad
eso es autocensura, algo normal que pasa
muchas veces, ellos me lo comentaron, y
yo, como he hecho un montón de veces,
lo cambié y no pasa nada”, añade el dibujante.
Al mismo tiempo, son cientos las
asociaciones, fanzines o revistas sin recursos
que han contado con sus dibujos
sin ninguna contraprestación.
Hablar de futuro en el humor gráfico
político le genera sentimientos encontrados.

De la vieja guardia destaca a El
Roto, y de los más jóvenes a Miguel
Brieva. “Lo importante es que mientras
haya algo que criticar, siempre saldrán
cosas”, afirma Azagra. Sin embargo, no
comparte ese optimismo con respecto a
los medios: “El Jueves será lo que sea,
pero es lo único que queda de los que podríamos
llamar francotiradores, porque
mira El País, el teórico diario progre...”,
continúa Azagra. “La gente tiene que espabilar,
porque sacar adelante un proyecto
de ese tipo cuesta mucho trabajo”.

+A Agrandar texto
+A Disminuir texto
Licencia

comentarios

0

separador

Tienda El Salto