Varios cientos de trabajadores convocados por los sindicatos han vuelto a marchar hacia la T-4 en la quinta jornada de huelga en Iberia. Los paros han obligado a la compañía a dejar 255 vuelos en las pistas de Barajas a causa de un conflicto que comenzó en otoño de 2012 cuando la empresa anunció la apertura de un Expediente de Regulación de Empleo que se formalizó el 1 de marzo. IAG planteó primero la supresión de 4.500 puestos de trabajo y el mediador del conflicto, Gregorio Tudela, quien fue acordado por empresa y sindicatos al Ministerio de Fomento, ha propuesto dejar en 3.141 los empleos destruidos.