Una vez más, de una convocatoria en las redes sociales arrancó una marcha que inundó el centro de Madrid, parando el tráfico desde la sede del PP hasta Sol, pasando por la calle Ferraz (cuartel del PSOE) y el Congreso de los Diputados.
Fotogalería de la manifestación
{{Vídeo: Daniele Grasso}} La marcha, sin embargo, empezaba en un clima reivindicativo ante la sede de los populares, aunque en esa ocasión se provocaba la primera detención. Pero la policía nada pudo hacer cuando los manifestantes se dieron la vuelta para inundar la calle Sagasta, cruzar las glorietas de Bilbao y San Bernardo y dirigirse hasta la sede de los socialistas en Madrid. "PSOE, PP, la misma mierda es" y "vuestra deuda no la pagamos" era cánticos casi obligados, además de varias referencias a Andrea Fabra y su "que se jodan" gritado en el Congreso de los Diputados.
{{Vídeo: Daniele Grasso}} Lo que encontró la marcha al acercarse a la calle Ferraz fue un fuerte despliegue policial. A pesar de los coros de "tu paga extra, dónde está", el clima llegó a tensarse hasta que los agentes de la Unidad de Intervención Policial decidieron dispersar los concentrados con una carga. Allí fue donde al menos otras dos personas fueron detenidas y Miguel recibía el porrazo que le dejaría, incrédulo, a la espera de la llegada del Samur. Fue uno de los muchos que sufrieron una agresión directa de la Policía.
{{Vídeo: AntenaPezTV}} La carga, sin embargo, sirvió solo para que la marcha retomara su camino. Dirección: el Congreso de los Diputados, donde el jefe del Ejecutivo anunció el miércoles lo que hoy ha concretado el Consejo de Ministros: un aumento del IVA del 18% al 21% (incluido el cambio de categoría para decenas de productos, desde las peluquerías a los teatros y los conciertos), la eliminación de la paga extra para los funcionarios y la disminución del 60% al 50% de la prestación por desempleo a partir del sexto mes. Y a estos recortes "seguirán más reformas esctructurales a lo largo del año", anunciaba hoy Soraya Sáenz de Santamaría durante la habitual rueda de prensa. "Claro, es que esta no es la gota que colma el vaso, es la enésima gota que colma el enésimo vaso", comentaba a DIAGONAL una anciana que esperaba el bus al paso de los manfiestantes por la Gran Vía. Ante el Congreso, además del despliegue policial, una doble línea de vallas impedía el paso. Una vez más, la situación no tardó en estallar, y los antidisturbios salieron para dispersar, nuevamente, a los manifestantes, que no habían menguado su número. A golpes de porra y disparando salvas al aire, alcanzaron su objetivo durante solo unos minutos, antes de que la mayoría de los concentrados decidiera seguir hasta la cercana calle de Atocha parando el tráfico. Entre los pitidos de apoyo de los conductores y las cacerolas que se asomaban de alguna ventana, la marcha llegó a Sol a tiempo por un grito mudo dedicado a la lucha de los mineros.
{{Vídeo: Carlos Corominas}}
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