AMÉRICA LATINA // INTEGRACIÓN DE LA INFRAESTRUCTURA REGIONAL DE SUDAMÉRICA (IIRSA)
Integración a golpe de megaproyectos

La Integración de la Infraestructura Regional de
Sudamérica (IIRSA), un conjunto de megaproyectos
orientados hacia un modelo desarrollista
y extractivista, es duramente criticado por organizaciones
indígenas y sociales. Según defienden,
la IIRSA, pese a ser compartida tanto por
Colombia o Perú como por los gobiernos de izquierda,
perpetúa la lógica capitalista.

14/01/10 · 0:00
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Surgida en el año 2000 como propuesta
del Banco Interamericano
de Desarrollo (BID) a la reunión de
presidentes de América del Sur
celebrada en Brasilia a finales de
agosto de ese año, la Iniciativa para
la Integración de la Infraestructura
Regional de Sudamérica (IIRSA) no
sólo ha sobrevivido a la supuesta
defunción del Área de Libre Comercio
de las Américas (ALCA)
en la
Cumbre del Mar de Plata en 2005
–a la que inicialmente iba vinculada–,
sino también a los cambios políticos
que se han sucedido en los
gobiernos de algunos de los países
de la región. Desde entonces, la IIRSA
ha pasado a convertirse en el eje
esencial del proceso de integración
regional de los países pertenecientes
no sólo al Mercosur o a la
Unasur, sino también de la ALBA.

¿Qué es la IIRSA?

La IIRSA es un conjunto de más de
500 proyectos organizados en diez
Ejes de Integración y Desarrollo
(EID) que, con un costo cercano a
los 75.000 millones de dólares, busca
eliminar las “barreras” naturales
que impiden la libre circulación de
las mercancías entre las diferentes
“islas” que compondrían la región.

Los EID, además, se estructuran
en siete “procesos sectoriales” que
buscan organizar el espacio geográfico
en base al desarrollo de una infraestructura
física de transporte
terrestre, aéreo y fluvial –proyectos
que representan el 87% de la IIRSA–;
de oleoductos, gasoductos, puertos
marítimos y fluviales y tendidos eléctricos
y de fibra óptica, entre otros.
Según datos proporcionados en la
XI reunión del CDT, de diciembre de
2009, el 74% de los proyectos presentan
avances concretos, con un
10% concluido, un 36% en ejecución
y un 28% en preparación. Respecto a
los avances en la Agenda de Implementación
Consensuada (AIC) 2005-
2010 –que incluye 31 proyectos prioritarios–
dos estarían concluidos, 19
en ejecución y 10 en preparación.

Tras la creación de la Unasur, el
CDE planteó la necesidad de que la
IIRSA se vinculara a la misma, para
lo que, en agosto de 2008, se creó el
Consejo Sudamericano de Infraestructura
y Planeamiento (CIP) de la
Unasur, del que se prevé que IIRSA
sea “el foro técnico de la planificación
y desarrollo de la infraestructura
de integración de América del
Sur”. Uno de los objetivos de la
IIRSA es la de vincularse al Proyecto
Mesoamérica –antiguo Plan
Puebla Panamá– para lo cual
Colombia entró a formar parte del
mismo en julio de 2006. Además,
las últimas reuniones del CDE han
contado con la presencia de representantes
del proyecto lo que ha permitido
avanzar en la conexión de
ambas iniciativas en temas eléctricos
y de telecomunicaciones, a través
de empresas creadas a tal efecto.

“Una dinámica capitalista”

A pesar de que la IIRSA se presenta
como un proyecto de “infraestructura
sostenible”, las denuncias contra
sus impactos medioambientales
,
políticos, económicos, sociales y
culturales se han sucedido desde
sus inicios. Así, mientras para la
Coordinadora Andina de Organizaciones
Indígenas (CAOI), la iniciativa
constituye un “ecocidio y un
genocidio”, para el analista Raúl Zibechi,
la IIRSA supone “una integración
doblemente subordinada: a
Brasil, por parte de los países sudamericanos,
y del conjunto de la
región al mercado y al empresariado
mundiales”, en tanto refleja un
modelo de “integración exógena”
dirigida a los mercados externos.

Según Jairo Estrada, profesor de
ciencias políticas de la UNAL y director
del Instituto Latinoamericano
de Servicios Legales Alternativos,
la IIRSA implica, además,
“una dinámica capitalista muy similar
a las lógicas de acumulación originaria
de capital, es decir, a las
lógicas de acumulación por desposesión”.
Un expolio que se estaría
desarrollando sin consultar a los
afectados y sin la realización de estudios
de impacto ambiental fiables
y que, según la analista Ana Ester
Ceceña, iría parejo a la firma de tratados
de libre comercio y la militarización
creciente de la región.


DECISIONES

La IIRSA está coordinada por los
gobiernos de los 12 países que
la integran a través del Comité
de Dirección Ejecutiva (CDE), formado
por los ministros de planificación
e infraestructura de los
estados miembros. A ella se le
suman los Grupos Técnicos Ejecutivos
(GTE) y el Comité de
Coordinación Técnica (CCT), integrado
por el BID, la Corporación
Andina de Fomento (CAF) y el
Fondo Financiero para el Desarrollo
de la Cuenca del Plata
(FONPLATA), principales financiadores
de la iniciativa junto al
Banco Brasileño de Desarrollo
Económico (BNDES).

Otros artículos relacionados en este número:

_ [EL ROL CENTRAL DE LA IIRSA PARA EL GOBIERNO BOLIVIANO->9867]
_ Por Pablo Villegas (CEDIB)

COLOMBIA // IMPACTOS SOCIALES Y AMBIENTALES DE LOS MEGAPROYECTOS DE INFRAESTRUCTURAS
_ [La incorporación de los negocios->9868]
_ Por Fernando Castrillón del Colectivo de Trabajo Jenzerá Bogotá, Colombia.

ENTREVISTA // MIGUEL PALACÍN, DE LA COORDINADORA ANDINA DE ORGANIZACIONES INDÍGENAS (CAOI)
_ [«Nuestro sueño es que este proceso sea más social y político»->9869]
_ Por Johnattan Rupire y Mar Soler Lima (Perú)

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