La primera semana del nuevo año estuvo centrada en la negociación entre la directiva de la multinacional gala Alten y su comité de trabajadores. El pasado mes de diciembre, la consultora tecnológica (con una cifra de ventas anual superior a los 65 millones de euros en España y con importantes clientes como Telefónica o Gas Natural) declaraba un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción de empleo para 141 empleados en España con 20 días de indemnización. Además, Alten Spain planeaba una reducción lineal salarial del 10% para el resto de la plantilla, con un aumento de la jornada laboral y la eliminación del complemento de Incapacidad Temporal (IT). La compañía gala publicó también su intención de unificar un calendario laboral, aspecto dificultoso al estar la plantilla de Alten conformada por antiguas empresas (con sus propios horarios y proyectos) absorbidas en los últimos años por la multinacional.

Ante tales medidas, la Confederación General del Trabajo (CGT) ha propuesto una huelga indefinida a partir de hoy 7 de enero en las diferentes sedes de la compañía como protesta, y exige la retirada de todas las medidas, previa aprobación en asamblea de trabajadores. La dirección de la empresa, aunque sí ha modificado parte de sus propuestas, se ha negado a retirar el ERE. Este pasado 3 de enero finalizaba sin acuerdo el acto de mediación en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) previo a la realización de la huelga indefinida y cuyo inicio será hoy día 7 en Barcelona, y mañana día 8 de enero, en Madrid y Valladolid. Sin embargo, el comité sí ha conseguido ciertas modificaciones: Alten ha accedido a que la reducción salarial del 10% no sea lineal sino por horquillas, así como a modificar la remuneración de los trabajadores afectados por las modificaciones de salario si la empresa cierra el ejercicio de 2013 con ventas superiores a los 66 millones de euros.

Concentraciones

En un principio, la huelga se mantendrá hasta que se retiren las medidas propuestas por la empresa, ya que “pide sacrificios pero no ofrece nada a cambio”, asegura Pablo López, miembro de la Sección Sindical de CGT en Alten Spain, grupo que ha convocado la huelga después de que no fructificaran las negociaciones de la directiva con CC OO (mayoría en el comité). Se da la circunstancia de que los afiliados de CGT en Alten Spain van en la lista única de CC OO (mayoría en el comité), al no haber podido reunir la representación de 21 delegados obligatoria. La empresa “nos vende las medidas impuestas con el eufemismo de variabilización del sueldo”, lamenta el delegado sindical. La huelga conllevará concentraciones en las sedes de Alten de Barcelona, día 7, y Madrid, 8 de enero, y en las sedes de uno de sus más importantes socios, Telefónica. El ERE entrará en vigor esta próxima semana. Ese es el tiempo que tienen ambas parte para sentarse de nuevo a negociar.

Antecedentes

Las medidas de ahora no son nuevas. Previamente, en agosto pasado, Alten declaraba un ERE temporal para 90 empleados de las sedes de Madrid, Barcelona y Valladolid. El problema es que los algunos trabajadores acogidos al expediente no cobran desde agosto al no hacerse cargo la Seguridad Social de los pagos, a expensas solo del complemento empresarial, aseguran fuentes sindicales. La multinacional Alten cuenta con 15.750 empleados en 14 países y facturó 1.060 millones de euros en 2011, y obtuvo un beneficio en el primer trimestre del 2012 de 598 millones de euros. Alten Spain pasó de facturar 36,8M€ en el primer semestre 2011 a 35,4 en 2012, sólo 1,4M€ menos, que supone una bajada del 3,8% respecto a 2011. CC OO critica que el escaso descenso de beneficios no justifica un ERE del 10% de plantilla, más aún teniendo en cuenta la coyuntura económica actual mundial.