R.D. DEL CONGO
Huelga entre los empleados de la ONU

Ganan ocho dólares al día, trabajan
sin cobertura médica, no tienen
derecho a ayudas ni ventajas
sociales, no cobran las horas extra
ni los fines de semana trabajados
y carecen de derechos laborales.
En estas condiciones trabajan
centenares de ‘jornaleros’
locales contratados por la Misión
de las Naciones Unidas para el
Congo (Monuc), según sus propias
declaraciones a varios medios
el pasado mes de agosto.

20/09/07 · 0:00
Edición impresa

Ganan ocho dólares al día, trabajan
sin cobertura médica, no tienen
derecho a ayudas ni ventajas
sociales, no cobran las horas extra
ni los fines de semana trabajados
y carecen de derechos laborales.
En estas condiciones trabajan
centenares de ‘jornaleros’
locales contratados por la Misión
de las Naciones Unidas para el
Congo (Monuc), según sus propias
declaraciones a varios medios
el pasado mes de agosto.

Junto a ellos, otros 2.000 trabajadores
locales, con unos salarios
superiores a los de los ‘jornaleros’,
pero muy inferiores a los del
personal internacional de la misión
de paz, reivindican “unos salarios
dignos”, la revalorización
de los mismos tras cinco años
congelados, el pago de las horas
extra y mejores condiciones.
El 28 de agosto, tras cinco días
de huelga, centenares de trabajadores
locales y jornaleros se vieron
obligados a abandonarla sin
ver satisfecha ninguna de sus reivindicaciones,
después de que la
propia ONU anunciara que sustituiría
temporalmente a los huelguistas
locales por personal internacional
o de empresas privadas.

Ante las reivindicaciones en
favor del cumplimiento de las leyes
laborales congoleñas, del
Convenio Internacional del Trabajo
y de la propia Carta de la
ONU, la organización ha querido
dejar claro que “todos los empleados
de la ONU se han comprometido
en todo momento a estar
al servicio de la Organización
y que no están regidos por convenios
o acuerdos colectivos”.

“Aunque podemos entender el
deseo de obtener algo mejor, de
tener más y durante más tiempo,
haría falta que las reivindicaciones
sean realizables y razonables”,
replicó a los trabajadores
Kemal Saiki, portavoz de la Monuc,
una misión que cuenta con
más de 19.000 militares y civiles
internacionales y con más de
2.000 civiles locales, y cuyo presupuesto
anual es de 1.166 millones
de dólares.

Ban Ki-moon, el flamante secretario
general de la ONU, defensor
de la guerra de Iraq en sus tiempos
de ministro de Exteriores de
Corea del Sur, y que ha heredado
una organización que, escándalo
tras escándalo, está en pleno descrédito,
declaró en enero de 2007:
“África será el centro de muchas
de mis prioridades”, pero se olvidó
de empezar por su propia organización.

+A Agrandar texto
+A Disminuir texto
Licencia

comentarios

0

separador

Tienda El Salto