Entrevista a Natalia Atz, representante Ceiba-Amigos de la Tierra en Guatemala
“En Guatemala seguimos viviendo en condiciones de guerra”

La coordinadora de Ceiba-Amigos de la Tierra Guatemala, Natalia Atz, visita nuestro país para denunciar los abusos que están cometiendo las multinacionales europeas en su país tras la firma de los acuerdos de paz

, Madrid
08/05/13 · 7:56
Natalia Atz denuncia la política represiva de las multinacionales en Guatemala. / FOTO: Bárbara Boyero.

Natalia Atz no necesita hablar alto. La contundencia de sus palabras y las atrocidades que dibujan son el amplificador más poderoso. “Vivimos en condiciones de guerra, pero no se están mencionando como tal”, expresa rotunda. Antes de concluir con esta afirmación, esta activista, coordinadora de Ceiba-Amigos de la Tierra Guatemala, realizaba una panorámica de la situación actual de su país en un desayuno en España, con motivo del Día Mundial de la Tierra. Un país que vivió una guerra civil durante 36 años, pero que se encuentra todavía lejos de la paz. “Nosotros décimos que mientras se iban firmando los Acuerdos de Paz en 1996, iban privatizándose las empresas estatales y esto dio lugar a que varios países vieran negocio. El problema es que, con el discurso de desarrollo para nuestras comunidades se estaba impulsando la llegada de las trasnacionales”.

Y con la entrada de las multinacionales comienza otro conflicto que en la actualidad se está recrudeciendo. “En los últimos tres meses ha habido siete asesinatos de líderes comunitarios en territorios donde hay problemas con hidroeléctricas o minería. El mes pasado, cuatro líderes comunitarios fueron secuestrados y uno resultó muerto. Un secuestro vinculado a este tipo de proyectos”, sentencia Atz. Las empresas europeas han puesto sus ojos en los recursos naturales del país tales como la pesca, los minerales, o los cursos de agua. Y se han encontrado con una sociedad organizada que ha plantado cara para proteger sus territorios ancestrales. A cambio, las comunidades, en su mayoría indígenas, han visto como se incrementaba la militarización de sus territorios.

“Se han instalado destacamentos militares en zonas donde ya no los había o donde nunca los hubo. Están en los departamentos con mayoría indígena cuando todos los estudios dicen que estos son los más pacíficos que hay en Guatemala”, expresa Mercedes Hernández, presidenta de la Asociación de Mujeres de Guatemala, mientras añade un dato: “La semana pasada el ministro del Interior, Mauricio López Bonilla, anunciaba que en alrededor de treinta regiones se va a instalar una especie de Estado de excepción y eso significa otra vez el cese de las garantías constitucionales para reprimir legalmente a la población e incluso para matar legalmente, que era un término que también se utilizó durante el conflicto armado”. Hernández tiene claro cuáles son las razones para esta represión. “Lo que interesa es atemorizar a la población y poner el aparato del Estado en favor de las multinacionales”.

Hidralia, la eléctrica española en territorio indígena

Entre los ejemplos, Natalia Atz destaca el caso de Santa Cruz de Barillas, un municipio situado en el departamento de Huehuetenango, al norte del país. Desde hace cuatro años, la empresa española Hidralia, a través de su filial guatemalteca Hidro Santa Cruz, intenta instalar un proyecto hidroeléctrico en el río Cambalam. Tal y como denuncia la Asociación Hegoa, en su documento “La presencia de Hidro Santa Cruz en Barillas”, el proyecto se asienta en un área utilizada tradicionalmente como centro de recreación y ceremonial, “limitando el uso doméstico y agrícola del agua y alterando un entorno frágil de por sí por la cercanía de la cabecera municipal”. Además, la comunidad realizó una consulta popular en 2007 en la que participaron 46.490 personas, de las cuales 46.481 rechazaron la minería y la explotación de sus recursos naturales.

Aun así, a finales de 2008 la población que vive en las riberas del río denuncia que personas ajenas a la comunidad comienzan a hacer mediciones de caudales. Poco después, la empresa comienza a comprar tierras a pequeños propietarios y se desatan los acontecimientos.
“Empezamos a ver presos políticos, encarcelados a raíz de mostrar su oposición al proyecto”, relata Atz. Sin ir más lejos, y tal y como denuncia Amigos de la Tierra, el pasado 7 de abril Daniel Pedro Mateo, una de las personas que había manifestado su rechazo a la construcción de la hidroeléctrica, fue secuestrado y posteriormente asesinado. Previo a esto, en mayo de 2012 otro líder comunitario fue asesinado y otros once fueron detenidos. En estos momentos, Rubén Herrera, otro de los líderes políticos, está encarcelado tras mostrar su oposición a la hidroeléctrica.

Daniel Pedro Mateo,
una de las personas que había manifestado su rechazo a la construcción
de la hidroeléctrica, fue secuestrado y posteriormente asesinado
Tras los sucesos de 2012 el Gobierno guatemalteco declaró el estado de sitio en Santa Cruz de Barillas. Para la coordinadora de Ceiba-Amigos de la Tierra la estrategia está clara. “Empiezan a crear el imaginario del enemigo interno que se usó en los años ochenta y se está usando ahora también. Al crearse ese imaginario del enemigo interno se justifica la represión, los asesinatos y la persecución”.

Pero ellos no se sienten el enemigo del desarrollo. “Nos dicen que somos antidesarrollo, pero la propuesta que estamos haciendo nosotros para un desarrollo real de las comunidades no está siendo escuchada. Hay todo una propuesta de ley de desarrollo rural que no está siendo aprobada en el Congreso y mientras nos están llevando a un modelo que por supuesto genera ganancias pero no para las comunidades”, añade Atz mientras recuerda que, pese a que el Producto Interior Bruto del país ha aumentado, sigue ocupando el primer lugar en América Latina en desnutrición y el cuarto a nivel mundial.

Y entonces es cuando remarca el objetivo de su visita a nuestro país. “Estamos pidiendo que los países europeos se pronuncien por todas las violaciones de derechos que se están produciendo en Guatemala. La represión se está sintiendo más fuerte y creemos que está vinculada al juicio contra el genocidio que se está sucediendo en estos momentos (y que en la actualidad se ha suspendido)”, reclama al tiempo que recuerda que en breve la UE tendrá que ratificar su Tratado de Libre Comercio con el país. “Lo que hemos pedido en Bruselas es que previo a esa ratificación se aborde el tema de derechos humanos. Nuestros gobiernos tendrían que garantizar los derechos humanos de sus habitantes antes de que las empresas entren en nuestros países”, sentencia.

Tags relacionados: Guatemala Pueblos indígenas
+A Agrandar texto
+A Disminuir texto
Licencia

comentarios

0

Tienda El Salto