Ideas para imaginar una huelga inclusiva
Érase una vez la huelga general

El paro del 29M puede ser distinto a la última huelga general "si nuevos actores sociales" desbordan un tablero de juego que permite pocos movimientos. Este artículo del blog Madrilonia explica por qué.

- El aterrizaje forzoso de la huelga en el planeta ‘Occupy’

16/03/12 · 12:50
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Ilustración: Madrilonia

Imaginando la huelga…

La gente toma las plazas, ollas populares, personas que comparten. Los pequeños comercios se unen a los pasacalles organizados por las asambleas de barrio. Hackers sonrientes porque las webs de las páginas de información bursátil llevan sin funcionar todo el día. Fábricas cerradas, transportes parados y las grandes multinacionales no venden nada, también hay huelga de consumo. Grupos de gente denunciando los desahucios a las puertas de cientos de sucursales bancarias. Cada parado toma su calle, y junto a sus amigos habla con conductores y peatones, apelando a la responsabilidad de todos para cambiar un modelo que deja fuera a muchos y muchas. De los hospitales salen mareas blancas, promovidas por aquellos que creen que sin una sanidad común la salud de la mayoría será peor. Profes, alumnos y familias desfilan con camisetas verdes, símbolo de los que apuestan por mejorar la escuela de todos y todas. Cuidadoras haciéndose visibles porque sin ellas no se mueve el mundo. Miles de personas sacando sus ahorros de esos bancos que nos han engañado para depositarlos en otros que funcionan con criterios éticos. Investigadoras, interinos y universitarias tomando los medios de comunicación para transmitir que quieren quedarse aquí y luchar por un futuro mejor. Precarios y autónomas que, si no pueden dejar de trabajar, salen disparados del curro para encontrase en las calles con la gente en la que confían. Gentes nacidas aquí o venidas de lejos que tienen mucho que aportar. Ciudades de todo el mundo atentas a una huelga inclusiva, de la gente común, del 99%.

Recordando la huelga…

La huelga general siempre fue un gran mito, en sentido positivo. Ese momento en el que mucha gente se pone de acuerdo para detener la producción y así conseguir mejorar sus condiciones de vida. La huelga general demostraba que los trabajadores y trabajadoras son quienes crean riqueza. También enseñaba que juntos se logran cosas.

En estos momentos ese mito no pasa por sus mejores horas: después de casi 40 años de rodillo neoliberal parece que la huelga general ha pasado de moda. Por un lado, Thatcher demostró que un gobierno podía aguantar meses de huelgas masivas y los políticos han tomado nota. Lo hemos visto en Francia y en Grecia. Por otro lado, cuatro décadas de políticas públicas orientadas a acabar con la capacidad de negociación de los trabajadores ha afectado la influencia de la gran puesta en escena de su fuerza. A fin de cuentas, las huelgas han sido verdaderamente eficaces en aquellas épocas en que los trabajadores podían ejercer un contrapoder por medio de generar escasez de mano de obra.

Los cambios en la organización productiva, con la deslocalización industrial y la atomización en pequeñas unidades, han restado importancia en número e incidencia a las grandes fábricas, aquellas con trabajadores capaces de detener y sabotear la producción. La precariedad dificulta esa capacidad, en gran parte debido a la inestabilidad que impide la creación de vínculos en el lugar de trabajo. El paro estructural, ahora de proporciones gigantescas, pero siempre presente desde la crisis de 1973, deja fuera de la huelga tradicional a millones de personas. A las que hay que sumar los trabajados no siempre reciben un salario: cuidados, producción cultural, formación, etc. Hoy la producción de riqueza tiene mucho que ver con cosas que no son fáciles de medir y que no revierten en toda la sociedad, que es las que las produce de manera conjunta. ¿Quién da valor a Facebook o Twitter? Sin duda la gente que lo usa y que por hacerlo no lo desgasta, al revés, lo revaloriza, aunque unas pocas manos acumulan los beneficios.

Pensando la huelga…

El próximo 29 de marzo, los dos grandes sindicatos han convocado a sus afiliados a parar el país sin demasiado entusiasmo. Las reacciones han sido dispares. El sector más moderado del Partido Popular, utilizando la legitimidad que le otorgan las urnas y contando con un plazo de tiempo para llevar a cabo su plan de reformas, apela a la responsabilidad de los sindicatos y a la paciencia de los ciudadanos. Mariano Rajoy defiende la rebaja de derechos laborales, aunque reconoce que no va a generar empleo. Y es que los gobiernos europeos, sobre todo los del sur y del este, para sobrevivir a la presión de los mercados permitida por el BCE y la Comisión Europea, están obligados a poner en marcha una serie de reformas que afectan a los equilibrios sociales en beneficio de una minoría. No hay alternativa, nada de cambiar la fiscalidad para repartir la riqueza ̶más abundante que nunca antes en la historia. Parece que el 1% manda y los gobiernos obedecen, máxime si obedecer supone cierta coherencia con su propio programa de gobierno.

Los sectores más duros de la derecha han aprovechado la ocasión para atacar a los sindicatos, utilizando críticas que son compartidas por amplios sectores de la población que no están de acuerdo con la financiación de liberados, con su inmovilismo durante los primeros momentos de la crisis y con su falta de cercanía hacia sectores sociales que por sus condiciones laborales ̶parados, precarias, amas de casa, autónomos, microempresarias, interinos ̶ no cuentan apenas para los grandes sindicatos. Por otro lado, la gente de izquierdas, que varían en su nivel de crítica a CC OO-UGT, asumen la huelga como el momento principal para detener las políticas del PP, muy parecidas a las que puso en práctica el PSOE.

Las cúpulas de las grandes centrales sindicales saben lo mucho que se juegan, que su capacidad como contrapeso frente a los gobiernos cada vez es menor y apenas pueden suavizar los ataques que vienen desde los centros de poder europeos y mundiales. CC OO-UGT necesitan un respaldo para negociar algo. El Gobierno no quiere salir muy dañado. Desde esta perspectiva, la huelga bien podría compararse con una partida de ajedrez. Ni unos ni otros creen que esta huelga pueda marcar un cambio. Rajoy seguirá diciendo que le obliga Europa, lo cual da muchas pistas, mientras Toxo y Méndez intentarán conseguir alguna concesión aunque tengan que dar la espalda a la gente que apoye la huelga.

La concertación CC OO-UGT-Gobierno-Patronal viene de lejos y resulta ciertamente inoperante en estos momentos, cuando el mundo laboral está lleno de figuras heterogéneas y abundan los trabajos intermitentes. Al igual que el bipartidismo deja mucho que desear, las formas de participación sindical benefician claramente a los dos grandes sindicatos, bien lo pueden asegurar los pequeños sindicatos que apuestan por otra forma de organización. El miedo de los sindicatos a perder su estatus y el oportunismo de los grandes empresarios en estos momento de crisis, está desdibujando la concertación en favor de los segundos, que seguirán exigiendo ventajas si no cambia el equilibrio de fuerzas.

Tomando la huelga…

La convocatoria de CC OO-UGT echa para atrás a mucha gente, que, aun estando en contra de la reforma laboral, no se siente representada por las cúpulas sindicales. Tampoco supone un aliciente la falta de apertura de los grandes sindicatos, que unos días atrás hacían explícita su intención de controlar al 15M en todo lo que tuviera que ver con la reforma laboral, como si los grandes acontecimientos pudieran ser controlados.

Después de la primavera pasada nuevos actores sociales pueden desbordar un tablero de juego que permite pocos movimientos. El 29M puede ser distinto al 29S. Desde que se tomaron las plazas mucha gente de diferentes condiciones y pareceres dejó claro que está harta de seguir siendo estafada con la excusa de la crisis. Ahora, ante la convocatoria de huelga general se abre la posibilidad de que los enjambres vuelvan a confluir para desplegar su creatividad. Pensar una convocatoria abierta es un factor clave, así como la necesidad de presionar a los que se están beneficiando de la crisis. Tomar la huelga puede ser un buen momento para ensayar un repertorio de acciones de cara a las convocatorias del 12-15 de mayo. El día 29 de marzo es un escenario inmejorable para actualizar formas de intervención que han sido muy útiles y para experimentar otras novedosas. Un inventario de acciones inclusivas, que abran nuevos escenarios y puedan ser replicadas.

La ola de alegría puesta en escena desde hace casi un año puede convertir la huelga en algo distinto a lo esperado. El reto es ser hostiles al 1% sin perder la ternura, sin dejar de protegernos entre todos para seguir conmoviendo a mucha gente. Si algo hemos aprendido del #15M es la cooperación entre diferentes. Si algo hemos vivido en las acampadas y en la red es un sentimiento que nos une para expresar que no somos mercancías y que queremos una democracia digna de tal nombre. Pero ese nosotros no emerge como oposición a tal o cual gobierno, a esta o aquella medida, sino como hartazgo ante un sistema político cada vez más falso y un régimen económico que perjudica a la mayoría. En estos momentos una huelga a la defensiva no es suficiente, el desafío es democratizar la toma de decisiones y conseguir nuevos derechos en provecho del 99%. Un nuevo pacto social que ponga encima de la mesa la necesaria redistribución de la riqueza y del poder en favor de la mayoría.

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comentarios

8

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    anónima
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    20/03/2012 - 2:21pm
    Perdona, Fran, pero no es el 15-M quien "ha aupado al PP al poder", como afirmas, sobrevalorando su influencia. El único que ha aupado al PP al poder ha sido el PSOE durante estos 30 años que van desde los pactos vergonzosos de la Transición hasta ahora.
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    anónima
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    18/03/2012 - 1:36pm
    <p class="spip">Curioso y novedoso enfoque el de este artículo. Está claro que el día de huelga no va a cambiar nada, si no que ademas por el preaviso y debido al bombardeo falsimediatico en su contra, quizá consiga en términos generales lo contrario a lo que se propone, debido al descrédito de los que convocan. Descrédito que se han ganado a pulso. Yo mismo he asistido a un mitin de CCOO, que, disfrazado de asamblea, solo dio pábulo a los voceros de la mesa convirtiendo el acto en una especie de misa en el que nadie puede contrariar la homilía de, en este caso, los curas de la mesa (experiencia tienen en manejar asambleas). El mismo Toxo diciendo en medio de su disertación (curiosa el parecido de esta palabra con desierto) “... el proceso de globalización es inevitable.” ¿Se puede esperar algo de quienes ya se sienten, están, derrotados antes que nada? Porque si se siente así, la lucha no sirve para nada, y solo resta negociar (de negocio). Y el que parte y reparte se lleva la mejor parte...</p> <p class="spip">Por cierto, habría que ahondar en la parte del negocio de la formación laboral que tienen los sindicatos, que parece que aumenta con la reforma proyectada. Hasta el punto que sus divisiones de enseñanza se permiten rechazar a algunos alumnos que han manifestado críticas a la forma en que se desarrollan ciertos cursos.</p> <p class="spip">Como he leído en otro lado, si la huelga en vez de un día fuera de cinco, otro gallo cantaría. Pero con mileuristas que no llegan a fin de mes, a ver quién apoya recibir en ese casi 300 € menos. Nos tienen cogidos por los huevo$...</p> <p class="spip">La desfachatez (de fachas) de intentar controlar el movimiento 15M en el tema de la perdida de derechos laborales es lógica. Ellos, como movimiento social domesticado, pretende domesticar al otro que, aún, no lo está. No pueden convivir perros con lobos. O se les ponen un buen collar de pinchos como a los mastines de León, o los últimos se los comen. Les va en ello sus sueldos y carguillos de liberados.</p> <p class="spip">La estrategia, claro es no limitar la protesta al día de huelga, que como ya se supone, será único, como lo fue el de Septiembre. Nada de huelgas a la francesa o a la griega, que esto es el reino de las Españas, y este pueblo está derrotado antes de luchar. Si el 15M quiere hacer algo mas que aupar en el poder al PP con su pasado “No les Votes” (que solo desmoviliza a los que no votan PP), aquí tiene que plantear batalla. Aunque sea acampando esta vez en las plazas de los polígonos industriales para demandar el trabajo que no llega, ni llegará. No se trata de recuperar el nivel de vida de hace 20 años, como nos prometen o como muchos aspiran. Eso es pasado, el planeta ya no lo aguanta, y los que tienen la sartén por el mango ganan mas así. No solo hay que protestar, hay que ir levantando la nueva sociedad ya. Nueva sociedad apoyada en nueva economía. Al margen, o como alternativa a la suya. Si no nos dan trabajo, tendremos que inventarlo nosotros. Y que se queden ellos con el suyo...</p> <p class="spip">Pero una sociedad no se cambia solo con una ola de alegría, que también. Enfrente hay una horda de caras de perro. Y a los perros solo los lobos pueden plantarles cara.</p>
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    anónima
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    18/03/2012 - 11:55am
    Seguramente sabes que esto que dices es mentira. Tu sabrás de qué TDTParty ha salido. No me casan los datos, la UGT-Madrid acaba de aprobar un ERE temporal por que no le salen las cuentas en sus balances, especialmente por que la Administración Regional de Madrid, dirigida por Esperanza Aguirre no está abonando los costes de los cursos de formación que le corresponden al sindicato (mientras paga religiosamente los que lleva a cabo la CEOE). Una actitud que no se compadece con la categoría de "sindicato traidor" ...al menos la Presidenta Regional aun no se ha enterado.
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    anónima
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    18/03/2012 - 11:50am
    "huelga general convocada sin entusiasmo por los sindicatos", "La convocatoria de CC OO-UGT echa para atrás a mucha gente".... Tal parece que algunos ya se están poniendo la venda. Me parece que la falta de entusiasmo está en algunos sectores que se han emborrachado de huelga general durante meses y ahora descubren estupefactos que no hay condiciones para que salga adelante. Podemos echarle las culpas a los sindicatos (faltaría más, para eso existen), pero me temo que la irresponsabilidad y miopía de los marginales ha alcanzado sus más altas cotas. Este huelga, aquí y ahora, es un favor a la derecha más reaccionaria de Europa. Si bajárais al suelo de la realidad y conviviérais con la gente común lo comprenderíais mejor. Seguro que había otras opciones para resistir la ofensiva neoliberal, eso os hubiera dado nuevas energías contra el sindicalismo traidor. Ahora la huelga os pilla con el pié cambiado. ...si la huelga no sale, ya sabemos quienes tienen la culpa, a que sí?
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    anónima
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    17/03/2012 - 10:31pm
    En principio sería interesante elaborar una lista-resumen de todo lo que se nos ha ido quitando durante la crisis y colocarlo en los tablones de anuncios de los centros de trabajo. Serviría como recordatorio y muchos despistados se pondrían las manos en la cabeza. En nuestro blog (insurgenteseinsumisos.blogspot.com) estamos haciendo algo así y esperamos tenerlo a punto en dos o tres días.
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    anónima
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    17/03/2012 - 6:13pm
    Referente a Candido Mendez y Compalia -El negocio e los sindicatos 10 millones de beneficio en 2010 lavozlibre.com
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    anónima
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    17/03/2012 - 3:38pm
    La realidad cotidiana se los está comiendo, siguen rindiéndole culto a espontaneidad. El peor enemigo es la carga histórica que arrastran que consiste en que los análisis parten del fenómeno. Cuando el fenómeno no es fundamento de nada. La huelga es la herramienta básica de lucha del proletariado que, se emplee mal es otra cosa. Quién tiene mayor capacidad de resistencia depende de la fuerza y la magnitud de la cohesión de la lucha del proletariado y esto lo dan los objetivos de lucha. Tenemos ahí en Estados Unidos que se está convocando a la huelga general para el primero de mayo. Estaba leyendo sobre un tipo de abejas japonesas que cuando eran atacadas se formaban de tal forma que en su ataque pudiesen arropar a su enemigo generando una temperatura de 40ºC que quemaba al enemigo sin hacerse daño ellas. ’Dénse con fuerza! Desde el país baratija llamado Venezuela que está enfermo de abulia 19.000 asesinatos el 75% victimas del robo y 25% en en ajustes de cuentas. En esta sociedad lumpen se clama es por el desnalgue y no por la lucha social
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    anónima
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    17/03/2012 - 2:03pm
    “Pecera” Un cortometraje dedicado a los trabajadores que se dedican a robar a otros trabajadores. ************************************************* Sinopsis: Lola, la directora de una sucursal de trabajo temporal recibe una inesperada llamada a última hora de la noche. Es su “jefe de zona” y necesita urgentemente hablar con ella… Dirigido por Carlos Bouvier y protagonizado por Camila Bertone http://www.youtube.com/watch?v=V-LtlnBFRxA
  • Ilustración: Madrilonia
    Ilustración: Madrilonia
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