Decenas de miles de doctores han salido hoy a la calle en Reino Unido para denunciar la imposición de un nuevo tipo de contrato por parte del gobierno. La medida afecta a los ‘junior doctors’, termino utilizado para referirse a aquellos médicos que están en prácticas, recién graduados o que están cursando su especialidad –equivalente al Médico Interno Residente MIR, en España–, que pueden llegar a acumular una experiencia laboral de hasta diez años. 

Las negociaciones entre el Secretario de Salud del Reino Unido, Jeremy Hunt, y la Asociación de Médicos Británica (British Medical Association, BMA por sus siglas en inglés) continúan bloqueadas, por lo que la huelga, convocada para los días 26 y 27 de abril, se ha mantenido.
 

Youssef El Gingihy: “El contrato para junior doctors sólo puede ser entendido en el contexto de la privatización

Está programada la retirada total de los servicios sanitarios durante hoy y mañana, desde las 8 de la mañana hasta las cinco de la tarde, 18 horas en total. Esta huelga es la quinta que los junior doctors convocan. No obstante, es la primera en la que no serán atendidos los servicios de urgencias, tales como unidades de accidentes o maternidades.

“La imposición de este contrato es tremendamente dañina para la moral de los junior doctors y los estudiantes de medicina, lo que ha resultado en una completa ruptura de la confianza entre los médicos y el Gobierno”, sostenía el doctor Johan Malawana, jefe del Comité de Junior Doctors del BMA, remitida a Jeremy Hunt el día 19 de abril. En dicha carta también se ofrecía desconvocar por completo la huelga si el gobierno abandonaba la imposición de este nuevo contrato.

El contrato que allana el camino hacia la privatización

El nuevo contrato plantea una subida del 13,5% de la paga básica. Sin embargo, otros elementos del salario final se limitarán, sobre todo las correspondientes que horarios nocturnos y fines de semana. Las horas trabajadas en horario diurno en sábado se pagarán con la tasa básica, mientras que las realizadas por la noche y el resto del fin de semana serán remuneradas por una cantidad hasta un 50% menor de la que se está ofreciendo hoy en día.

Youssef El Gingihy, médico británico y colaborador en medios como The Independent o The Guardian, sostiene que “el contrato para junior doctors solo puede ser entendido en el contexto de la privatización. Dicho contrato implica la reestructuración de la mano de obra con el fin de reducir los salarios, y está diseñado para aumentar los márgenes de beneficio, allanando el camino para la privatización. Si este contrato llega a implementarse, entonces seguirán contratos similares para todo el personal del sistema sanitario”.

El Gingihy asegura que el ataque a los salarios y las condiciones laborales está rompiendo la lealtad del sistema sanitario inglés hacia el concepto de una sanidad pública y universal, razón por la que numerosos médicos estarían preparados para abandonar en masa el sistema sanitario inglés si este contrato se les impone.