Por sexta vez en un mes, decenas de miles de personas han salido a las calles para protestar contra la reforma de la ley del trabajo. El Ministerio de Interior francés cifraba en 120.000 los manifestantes en toda Francia, un número que lo convocantes identificaban sólo para la gran marcha de París. 

Convocados por sindicatos, organizaciones de estudiantes y por el movimiento de las plazas Nuit Debout, trabajadores, universitarios, estudiantes de instituto han evidenciado en más de 200 manifestaciones y concentraciones por todo el país el rechazo a una ley ya muy impopular y el descontento de la ciudadanía ante las políticas económicas del gobierno socialista.

Las multitudinarias movilizaciones, pese a producirse en medio de un día festivo para el sector de la educación, se prolongarían durante todo el fin de semana. El movimiento Nuit Debout (Noche en pie), cuya extensión por todas las ciudades del país sigue sin pausa y con notable éxito, ha convocado a que se continúe con la toma de las plazas esta noche.

Sindicatos y movimientos ya han anunciado una nueva convocatoria para el 28 de abril.

En Toulouse, unas 20.000 personas, según los convocantes, han desfilado por el centro de la ciudad. En Marsella, la tercer ciudad de Francia, entre 5.000 y 10.000, según los organizadores, han tomado la zona del viejo puerto. Según declaraba una activista de dicha ciudad a Diagonal, “si hubiera una convergencia de las luchas que reúna a universitarios, estudiantes de instituto, los proletarios y los jóvenes de los extrarradios desheredados, el Gobierno tendrá serios problemas”.

En París, el impresionante cortejo humano, que arrancó a las 14h de la plaza de la Republique, epicentro del movimiento Nuit Debout, no había terminado de llegar al final de la manifestación, Plaza de la Nation, a las 18h.

Las movilizaciones, en su mayoría de tono reivindicativo y festivo, se han visto empañadas por las denuncias de agresiones policiales y enfrentamientos. Al cierre de esta nota informativa, en varias ciudades, las duras cargas policiales acompañadas de lanzamiento de gases lacrimógenos, se habían saldado con decenas de detenidos y heridos.

En París, según informaba la periodista Cyril Castelliti, “la policía lanza asaltos regulares, a golpe de bombas lacrimógenas, durante los cuales los agentes de paisano intentan detener a manifestantes, pero estos últimos son tan numerosos que la policía retrocede cada vez”.

Al final de la manifestación, la policía había cercado la Plaza de la Nation, donde terminaba la marcha.

Desde Nuit Debout lamentan los incidentes tras la manifestación contra la reforma laboral y recuerdan que se trata de un movimiento pacífico.