Nuevo intento de suicidio tras perder la vivienda

La desesperación por perder la vivienda sigue generando capítulos dolorosos. En Carabanchel se acaba de vivir un intento de suicidio relacionado con este drama.

12/11/15 · 12:53
Una acción de protesta en Deutsche Bank por el caso de D. / Asamblea Popular de Carabanchel

D. está ingresada en el hospital y su recuperación puede alargarse hasta dentro de un mes, según cómo reaccione al tratamiento. Ahora se encuentra más tranquila pero el motivo de su ingreso hospitalario es que hace unos días intentó quitarse la vida.

"Tenía preocupación por nosotros, sentía que nos había fallado por haber hecho lo que hizo. Pero también está preocupada por lo que le espera cuando salga del hospital", cuenta a Diagonal Sonia, compañera de D. en la Asamblea Popular de Carabanchel (Madrid).

Lo que le espera cuando salga del hospital es la calle, no tener un techo bajo el que vivir. A ella y a su hija, menor de edad.

Las dos vivían de alquiler desde 2009 en un piso cuyo propietario no pudo hacer frente a los pagos de las cuotas del préstamo hipotecario firmado con Deutsche Bank. En 2011 se produjo la ejecución y el inmueble pasó a manos de la entidad bancaria.

D., pese a percibir únicamente la Renta Mínima de Inserción, siguió pagando los suministros de agua y luz y la comunidad de propietarios, dado que el banco nunca se puso en contacto con ella para fijar unas cuotas mensuales de alquiler tras adjudicarse la vivienda.

Sin embargo, en la actualidad, señala Sonia, "el banco le reclama unos 11.000 euros por haber estado haciendo uso de la vivienda después de que la entidad se quedara con ella".

D. acudió a la comisión de vivienda de la asamblea "y a partir de ahí pasó a estar activa, acude a acompañar a compañeras, a parar desahucios".

Finalmente, abandonó la casa hace un par de meses, antes de que la orden de desalojo se ejecutara. "Se fueron a una habitación por la que paga 400 euros al mes, cuando ella recibe una prestación de 300. Pudo pagar el primer mes y la fianza, con lo cual se va a quedar sin vivienda otra vez", explica la activista.

La desesperación de chillar a una pared

A pesar de que no es fácil explicar un intento de suicidio por un único motivo o establecer una relación directa de causa-efecto, desde la Asamblea Popular de Carabanchel consideran que en su caso está "totalmente relacionado con la pérdida de la vivienda, con pensar que su hija se quedaba en la calle", asegura Sonia, quien añade que D. "no habría pensado nunca en hacer esto si no se hubiera encontrado tan desesperada. El tema de la vivienda ha sido un problema que ha estado en su cabeza en todo momento. Creemos que está relacionado porque ella ha intentado luchar de mil maneras, acudiendo a negociar con la entidad bancaria, intentándolo a través de Servicios Sociales, pidiendo ayuda en los servicios sanitarios… y al ver que en todos los sitios encontraba negativas, se desesperó".

Ante esta situación de desamparo, en octubre de 2014 la Plataforma de Afectados por la Hipoteca y la Asamblea Popular de Carabanchel se dirigieron a Deutsche Bank para solicitar la condonación de esa deuda cuyo pago exigía la entidad a D. y un contrato de alquiler según la Ley de Arrendamientos Urbanos que ella pudiera asumir. Como gritar a una pared.

38.000 desahucios en medio año

En el segundo trimestre de 2015 se han producido en España 18.739 lanzamientos de inmuebles, que incluyen no sólo viviendas, una cifra prácticamente idéntica a la del mismo periodo del año pasado, según el informe Efectos de la crisis económica en los órganos judiciales, elaborado trimestralmente por la sección de Estadística del Consejo General del Poder Judicial. En los seis primeros meses del año se contabilizan unos 38.000 lanzamientos inmobiliarios.

Más de la mitad de los ejecutados entre el 1 de abril y el 30 de junio, cerca de unos 10.000, fueron consecuencia de la aplicación de la Ley de Arrendamientos Urbanos, es decir, proceden del impago de alquiler.

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