Cuarenta personas del Grupo de Vivienda de Usera y de diversas asambleas de vivienda de Madrid han pasado la noche en el portal, las escaleras y el interior del piso que ocupaba una pareja con tres hijos, de 9, 3 años y un bebé de apenas 20 días. Esperaban al tercer intento de desahucio de esta vivienda del barrio de San Fermín, en Usera, perteneciente a Kutxa Bank. La pareja, ambos en paro, tan sólo recibe la Renta Mínima de Inserción de poco más de 500 euros.

Por la mañana, más gente se ha unido al grupo que ha pasado la noche en la vivienda, aunque no se les ha permitido pasar. Los antidisturbios, que han llegado en torno a las seis y media de la mañana y han rodeado el edificio, han echado a las personas que que se encontraba en el portal. Finalmente, los antidisturbios han conseguido entrar pasadas las ocho de la mañana y llegar al rellano. Han sacado a la fuerza a la prensa que se encontraba allí y han empezado a golpear y sacar por la fuerza a las personas congregadas, que ejercían una resistencia pacífica. Otro grupo de unas veinte personas que permanecían en el interior de la vivienda ha sido expulsado sobre las nueve de la mañana, después de que los antidisturbios exigieran también a la prensa que abandonara la vivienda, algo a lo que los periodistas se han negado por estar ejerciendo su trabajo. Poco después, tanto periodistas como activistas y abogados han sido expulsados e identificados. En el interior de la vivienda ha quedado Jorge, el desahuciado, junto a la policía y sin la presencia de su abogada.

Durante la expulsión de las personas que se encontraban en el rellano y, posteriormente, en dos cargas policiales contra los activistas y vecinos concentrados en los alrededores de la vivienda, seis personas han sido detenidas y ha habido varios heridos con contusiones graves. La agencia Europa Press ha difundido una nota en la que, a partir de fuentes policiales, asegura que uno de los asistentes al intento de bloqueo del desahucio ha tratado de forzar el cordón policial para arrebatarle la pistola a un agente. Una persona asistente al desahucio ha negado a DIAGONAL que algo así haya ocurrido. 

Los detenidos han sido trasladados a la comisaría de Usera, a cuyas puertas, al cierre de estas líneas, comenzaban a concentrarse activistas para mostrarles su apoyo.