Las trabajadoras de Panrico de la planta de Santa Perpètua de Mogoda en Barcelona decidieron el viernes en asamblea acabar con la huelga indefinida iniciada hace aproximadamente ocho meses contra el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por la empresa y que afecta 215 trabajadoras. Con 99 votos a favor, 45 en contra y 3 votos nulos, la plantilla ha decidido volver al trabajo el lunes, tras una rueda de prensa que han convocado a las diez de la mañana en la puerta de la fábrica.

La decisión se ha concretado después de una asamblea tensa, donde la plantilla ha decidido no aceptar ni la mediación de la Generalitat ni los acuerdos que la dirección de Panrico ha puesto sobre la mesa, ya que "el objetivo de no permitir ni un solo despido sigue vigente ", según ha explicado el portavoz del colectivo Felix Yela. "Seguiremos luchando porque estamos convencidos de que Santa Perpètua tiene futuro y hoy en día no sobra nadie", añadió.

El ERE de la "persecución sindical"

La huelga indefinida comenzó el pasado 13 de octubre sólo en la fábrica de Santa Perpètua de la Mogoda, inicialmente para reclamar los salarios que Panrico no había pagado. Las semanas siguientes, la empresa decidió que los 745 despidos previstos en todo el grupo, una parte importante se producirían precisamente en esta planta vallesana, en una clara medida de "persecución sindical", tal como denunció la plantilla en su momento. Desde entonces, las trabajadoras de Panrico han protagonizado una huelga histórica y ejemplar de 237 días, la más larga de las últimas décadas.

El regreso al trabajo de la plantilla de Panrico ha coincidido con la sentencia de la Audiencia Nacional que declara nulo el ERE presentado por Coca-Cola y que exige la readmisión de las 812 trabajadoras despedidas. La multinacional ya ha anunciado que recurrirá la sentencia.