indemnizaciones por pisos sin entregar
El Supremo da la razón a los cooperativistas

Este mes se publica la sentencia que forzará a las aseguradoras a pagar millones a los socios que se quedaron sin casa.

, Redacción
18/09/13 · 8:01
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Terrenos en los Ahijones, una de las promociones fantasma en la que se quedaron atrapadas cientos de cooperativistas.

Una sentencia del Tribunal Supremo obligó en julio a la aseguradora Asefa a devolver a medio centenar de cooperativistas de vivienda del barrio de Valdebebas (Madrid) el dinero que habían adelantado por unos bloques que no llegaron a construirse. Se trata, en total, de cinco millones de euros, y la sentencia ha confirmado una vía para miles de hogares que confiaron parte de sus ahorros a proyectos de vivienda que nunca llegaron a concretarse. Ahora, en septiembre, se conocerá su contenido literal y se espera que el precedente incline más la balanza en contra de las aseguradoras.
 

La aseguradora Asefa tendrá que pagar cinco millones de euros a medio centenar de cooperativistas

Según explica a DIAGONAL Marta Serra, que atiende en el bufete Sala & Serra Abogados casos de cooperativistas estafados, el despacho tiene pendientes casos que afectan a decenas de socios y socias cooperativistas que participaron como autopromotoras en la zona de Los Berro­cales, Los Ahijones y El Caña­veral, urbanizaciones situadas en la A3 a escasos kilómetros de Madrid.

Por el lado jurídico, el centro de la cuestión radica en que las aseguradoras no cubrían en sus pólizas el riesgo que asumían los y las cooperativistas en caso de que la construcción no se llegara a terminar o ni siquiera se llegara a empezar. “Es un precedente difícil”, cuenta Serra, “aunque la práctica de las gestoras de las cooperativas era decirle a los socios que su dinero estaba asegurado”.

Un juzgado de primera instancia madrileño sentó un primer precedente positivo para los cooperativistas en diciembre de 2012 al condenar a la aseguradora HCC a pagar a 151 socios de una promoción en Los Berrocales más de 6 millones de euros en total. Lo que hace la sentencia del Supremo (que fue acordada por unanimidad) es fijar una doctrina sobre el carácter obligatorio del seguro de caución que amparaba los cooperativistas, según lo establecido en la Ley 57/1968.

Una historia de la burbuja

Al margen de las importantes consecuencias económicas para las aseguradoras si se generaliza el criterio del Supremo, la historia refleja uno de las consecuencias del modelo de urbanización seguido en los años de la burbuja. Es el caso de Jorge Castro, uno de los cooperativistas de Los Ahijones, trabajador del sector de la construcción hasta que se quedó en paro en 2009, pero a quien las consecuencias de este modelo pillaron de lleno en plena expansión: pese a haber pagado 37.000 euros a la gestora entre 2001 y 2005, ha estado viviendo en casa de sus padres y de sus suegros hasta hace un año, y ahora vive de alquiler. Su esperanza es poder recuperar el dinero que puso en los supuestos buenos tiempos.

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