"Un fantasma recorre Europa...", así empezaba el Manifiesto Comunista de Marx y Engels. En la actualidad y utilizando esta nueva palabreja, "fascioneoliberalpopulismo", podríamos definir el fantasma que se cierne sobre este, no sé si bien llamado, mundo civilizado. Después de la debacle del sistema financiero provocado por este mismo sistema, pero que estamos pagando los que siempre pagamos todo, ahora nos intentan tranquilizar con acontecimientos (grandes revueltas en el mundo árabe, protestas en algunos países europeos) que, en principio, podrían parecer alentadores para millones de ciudadanos, acontecimientos que esperamos desde hace mucho tiempo, y que cuando parece que se van a producir, te das cuenta de que están controlados por los mismos sistemas concentrados en la susodicha palabreja.

El último acontecimiento con que nos han “tranquilizado” ha sido la “ejemplar” y “heróica” misión del comando estadounidense que acabó con Bin Laden y que al final, y según los detalles que se van conociendo, no ha sido más que un acto de terrorismo de Estado que más que tranquilizar, lo que hace es crear más inseguridad en todo el mundo. Es sospechosamente curioso que muchos de los “periodistas de investigación” que, con razón, desmantelaron el terrorismo de Estado de los Gobiernos del Sr. González, ovacionen ahora con descarada adulación lo que parece ser terrorismo del Gobierno de los Estados Unidos de América.

Aquí, en Europa, mientras países como Bélgica e Islandia nos demuestran cómo es posible, y sin hacer mucho ruido, organizarse sin gobierno, la España más profunda, lamentable y triste, aparece de nuevo, gracias al Partido Popular y a los medios de difusión afines. La derecha más reaccionaria y nostálgica de otros tiempos.

Las reacciones tras la no ilegalización de Bildu por el Tribunal Constitucional de los asiduos voceros del Partido Popular (Pons, De Cospedal, Trillo, Mayor Oreja, Rita Barberá, Esperanza Aguirre, etc.), con el consentimiento de su máximo representante, Sr Rajoy y utilizando el patético estilo del Sr. Aznar, no deja de ser, para los sensatos y por tanto cabreados ciudadanos de este país, un síntoma de auténtico pavor (por parte de la más casposa y populista clase política y periodística) a que los graves problemas del terrorismo de ETA en el conflicto del País Vasco se solucionen de manera pacífica y durante las dos legislaturas del actualmente caduco Presidente, Sr. Rodríguez Zapatero.

Una triste realidad “fascioneoliberalpopulismo” amenaza al mundo...