Foto: J.V.

Tres concentraciones distintas han partido a las 19 horas de la plaza España siguiendo cada una su itinerario. La más numerosa, convocada por CC OO, UGT y STEI-I ha congregado a casi 10.000 personas y se ha desarrollado sin incidentes, exceptuando un pequeño momento de tensión cuando la comitiva ha pasado delante del centro de El Corte Inglés en la capital palmesana. A pesar de que el local tenía las persianas bajadas, algunos de los manifestantes se han lanzado contra los cristales increpando a los empleados que no habían secundando la huelga.

Los sindicatos mayoritarios han cifrado en el 68% el seguimiento de la huelga, reconociendo el fracaso en el sector público, en las pequeñas y medianas empresas y entre los autónomos. A pesar de eso, el secretario general de UGT-Baleares, Lorenzo Bravo, ha asegurado que la huelga ha sido “digna” y “exitosa”. Su homóloga en CC OO, Katiana Vicens, en la misma línea se ha mostrado “satisfecha” y ha declarado que “digan lo que digan, hoy no es un día que transcurra con normalidad”.

Por su parte, la secretari general de CGT-Balears, Nanda Hernández, se ha mostrado “orgullosa” de la respuesta de los suyos, en una segunda manifestación que ha congregado a unas 2.000 personas, todo un éxito de participación según la gran mayoría de los asistentes. Esta manifestación estaba convocada por CGT, CNT, CTA y se han sumado distintas organizaciones, como ATTAC, el PCE o Maulets. En un mitin final amenizado con una “performance”, Hernández ha hecho una llamada a que “la lucha continúe”. Por otro lado, unas 100 personas se han adherido a la tercera manifestación convocada hoy, por el sindicato USO, en la capital balear.

Un único incidente menor se ha producido cuando las dos principales manifestaciones se han encontrado, frente a frente, en la céntrica Calle Conqueridor, a la altura del Parlament balear. Un ejemplo del buen hacer de las autoridades, que habían autorizados ambos itinerarios sin percatarse que estos iban a cruzarse. Finalmente, las manifestaciones se han cruzado sin problemas, aunque se han escuchado algunos reproches, y algún insulto, a dirigentes de UGT y CCOO.

 

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